El Newcastle dio la bienvenida a una nueva era en su historia en el partido de Premier League que lo enfrentaba al Tottenham Hotspur. La afición vivió una fiesta para dar la bienvenida a la nueva propiedad árabe, que esgrime la posibilidad de ensamblar un proyecto ganador, y Callum Wilson anotó el primer gol del encuentro en el minuto 2.
El Newcastle acaba de arrancar una nueva era. Lo sabe la afición, lo sabe la plantilla y lo sabe la propiedad árabe que ha encendido la emoción en la hinchada. Con una capacidad monetaria sin parangón en el panorama futbolístico actual, desencadenó una fiesta de bienvenida en el Saint James Park con motivo del partido de Premier League contra el Tottenham Hotspur.
El ambiente se notó desde tiempo antes de que arrancara el enfrentamiento. Los seguidores se agolparon a las puertas del estadio para arrojar cánticos de ánimo y de apoyo a los recién llegados mandamases. Estos, una vez el choque estaba a punto de comenzar, agradecieron el baño de aplausos de las gradas desde el palco.
Un desajuste de Reguilón facilitó que el atacante apareciera para adelantar a los suyos en el luminoso -aunque Ndombélé empató poco después-. Que todo futbolista de la plantilla del Newcastle se reivindique es fundamental porque la nueva dirección podría efectuar cambios para elevar el nivel del grupo y quien no demuestre un rendimiento notable podría quedarse fuera.