El Cacereño eligió creer. "El que no crea que no venga" ha sido el lema que ha vestido a la ciudad extremeña estos días después del 2-0 que le endosó el Real Ávila en la ida de las semifinales del 'play off'. Y finalmente, el Príncipe Felipe fue testigo de una remontada que se hizo esperar, pero que acabó llegando.
Palacín, en el minuto 14, redujo las distancias en el global con un remate acrobático en el área. El 1-0 dejaba la clasificación a solo un gol para los locales debido a su mejor clasificación en la liga regular. Fueron segundos, mientras que los de Víctor Valdés acabaron quintos en su grupo.
Poco antes del descanso, la machada se hizo algo más asequible para el Cacereño. Babu fue expulsado en el minuto 38 y dejó con 10 al Real Ávila, al que se le venía encima todo un segundo tiempo con uno menos y en un estadio abarrotado y con la ilusión por bandera. Sin embargo, a los extremeños les costó sobremanera encontrar el tanto que forzara la prórroga.
Este llegó ya en el minuto 98, cuando Marcos Carrillo, tras un córner, remachó de cabeza una pelota en el área chica que desató la locura del Príncipe Felipe. Los 30 minutos del tiempo extra transcurrieron sin incidencias en el marcador, por lo que el pitido final confirmó la presencia del equipo local en la final por el ascenso a Primera Federación.