Los goles de Pedro Neto y Enzo Fernández dieron al Chelsea la victoria por 2-0 ante Los Angeles FC en sus estreno en el Mundial de Clubes. Los ingleses, dominadores y sin pisar al máximo el acelerador, impusieron el peso de la lógica para encarrilar su pase a octavos de final.
El Chelsea cumplió con los pronósticos y arrancó el Mundial de Clubes con un triunfo lógico por 2-0 ante Los Angeles FC. El cuadro inglés fue mejor durante la mayor parte del encuentro, aunque los estadounidenses tuvieron sus momentos y aprovecharon los minutos de zozobra 'blue' para soñar con un punto que finalmente no llegó.
Tras las exhibiciones de Bayern y PSG, se esperaba también una buena puesta en escena de los de Stamford Bridge ante un rival de un nivel muy alejado al suyo sobre el papel. Sin embargo, el cuadro angelino, con mucha voluntad y ganas de demostrar, dejó unos buenos minutos de inicio, queriendo el balón y tratando de crecer desde la posesión.
Se agradecían esas buenas intenciones, pero pronto la realidad comenzó a ganar peso en el partido. Los 'blues', con una presión alta y un Madueke hiperactivo, comenzaron a dominar el partido y generar problemas al club de la MLS. Cucurella, de mediocentro gran parte del partido, hacía de lanzador para un '11' que tuvo en sus botas una gran ocasión para adelantar a los suyos antes del minuto 20, pero el eterno Lloris sacó un pie felino.
Era el primer aviso y con el mismo comenzaron los mejores momentos del Chelsea en la primera mitad, sin dejar respirar a un cuadro angelino que, pese a todo, lograba sobrevivir bien plantado atrás ante unos 'blues' que acumulaban hombres por el centro y liberaban los costados para Madueke y Pedro Neto.
Precisamente el portugués, a la postre MVP del partido, fue el encargado de abrir la lata pasada la media hora con un auténtico golazo. Recibió al espacio por la derecha, se plantó en el área con espacio, quebró hasta tumbar en el suelo a Hollingshead y definió con un disparo al palo corto para batir a Lloris. 1-0 y todo marchaba según lo establecido antes del descanso.
Tras el gol, los pupilos de Enzo Maresca mantuvieron su dominio, aunque con una marcha menos. Este bajón se mantuvo tras el paso por los vestuarios. Los ingleses dieron entrada a Enzo y Malo Gusto por Lavia y Reece James (este amonestado), mientras que los californianos, que en el primer tiempo se vieron obligados a cambiar a Ordaz por el protocolo de conmoción, dieron entrada al veteranísimo Giroud.
La entrada del galo le dio un nuevo aire al equipo de Steve Cherundolo. Aprovechando el respiro de los 'blues', los angelinos tuvieron un gran arranque de segunda parte en el que rozaron el empate, pero una gran intervención con el pie de Robert Sánchez evitó el 1-1 tras una gran acción plagada de fe de Bouanga.
Giroud era un faro para los suyos, que con el paso de los minutos aparecían cada vez con más frecuencia en las inmediaciones del francés en busca de una segunda jugada. Ello rompió un poco el encuentro, aunque Los Angeles FC seguía defendiendo bien por acumulación y el cansancio de una temporada tan larga parecía hacer mella en los ingleses.
Esta mezcla de factores llenó de ilusión al conjunto de la Major League Soccer, que por momentos soñó con la igualada con acercamientos peligrosos al área de Robert Sánchez, pero la lógica golpeó de nuevo a los estadounidenses cuando Enzo, tras un gran centro de Delap, uno de los grandes fichajes del Chelsea, puso a placer en el área el 2-0 en el 80'.
Ahí, pese a los intentos de Bouanga, murió el partido. El Chelsea cumplió sin excesivo brillo, con un Palmer apagado. Tampoco le hizo falta su mejor versión. Sumó tres puntos con los que todos contaban y pone ya un pie en los octavos de final a costa de Los Angeles, que pese a perder dio la cara y dejó un encuentro con el que poder ilusionarse de cara a seguir peleando por esa teórica segunda plaza por la que también lucharán Flamengo y Espérance de Tunis.