Chicharito Hernández ya fue presentado como nuevo jugador de LA Galaxy y aprovechó para explicar su momento actual en el mundo del fútbol. Ante tantas conjeturas sobre qué pasará, qué podría haber pasado o qué pasaría, dijo: "Si mi abuela tuviera bigote, sería mi abuelo".
El delantero llegó al Sevilla con la ilusión de hacerse un hueco en el fútbol europeo, pero no lo consiguió. Quedó en un segundo plano y acabó en la rampa de salida de la entidad, de donde ya ha dado el salto oficialmente a la MLS: él mismo se mostró afectado por su fracaso.
Pero, una vez con sus nuevos objetivos por delante, volvió a sonreír. En su primera rueda de prensa como jugador del plantel americano, se le hicieron varias preguntas sobre dónde podría haber acabado jugando en caso de que las cosas hubieran salido distintas.
Sin medias tintas, él tiró de refranero para contestar: "Hay un dicho muy futbolero que hemos escuchado que dice que, si mi abuela tuviera bigote, sería mi abuelo". Con ello, el mexicano se refirió a que las cosas son como son por mucho que uno esboce conjeturas.
Justo después llegó la anécdota del evento. Le entró una llamada telefónica en mitad de una respuesta y tuvo que frenarse: "Como siempre te lo he dicho... Perdón, es que me está entrando una llamada", dijo. La sala se echó a reír y todo quedó en una gracieta.