Comienza la locura

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Comienza la locura. EFE

El duelo entre Alavés y Valladolid abre un sprint final de seis jornadas por la permanencia en el que siete equipos, separados solamente por nueve puntos, se jugarán seguir el próximo curso en Primera División.

La última fecha dejó un regusto más que amargo en Pucela. Y es que el cuadro blanquivioleta, tras dejar escapar el triunfo ante el Getafe, cayó por primera vez en esta Liga a puestos de descenso.

Lo ha hecho a falta de seis jornadas y, para más presión, el propio Valladolid será el encargado de abrir fuego en un sprint final de Liga en el que siete equipos se juegan la vida.

Junto al cuadro dirigido por Sergio González, Huesca, Rayo, Valladolid, Celta, Levante, Villarreal y Girona pelearán por no ocupar las tres plazas que condenan a Segunda División.

El Valladolid abrirá la jornada ante el Alavés, que se está jugando su presencia en Europa de cara a la próxima temporada. Los pucelanos suman dos puntos de los últimos doce y se encuentran en la 18ª plaza con 31 puntos.

Está tan apretada la situación que un triunfo en Mendizorroza haría que el equipo vallisoletano igualase al Girona con 34 puntos... ¡en la 14ª posición!

Los dos equipos que más complicado tienen mantenerse en la élite son Huesca (25 puntos) y Rayo (27), aunque bien es cierto que los madrileños tienen hasta cuatro duelos directos (el propio Huesca, Levante, Valladolid y Celta).

Por delante del Valladolid, el Celta se aferra a Iago Aspas, a Balaídos y al duelo de este sábado. Toda una final en tierras gallegas, ya que se mide al Girona.

En la 17ª plaza está un Levante al que una mala racha brutal y su fragilidad defensiva (es el equipo más goleado de Primera) han condenado a pelear por no bajar tras una buena primera vuelta.

Justo por encima del equipo 'granota' está el Villarreal, con los mismos 33 puntos que sus vecinos. De los de abajo, es el club con mejor dinámica y que mejores sensaciones transmite.

Y por encima de todos, de momento, está un Girona que llega al sprint final tras cuatro derrotas seguidas y con un compromiso a vida o muerte ante el Celta. En definitiva, una locura de Liga de tan solo seis jornadas.

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