Con puntos y sin ritmo
América de Cali se impuso por 2-1 a Atlético Bucaramanga en un duelo muy falto de ritmo en el que solo la tensión final puso picante. Ureña, Vergara y Torres fueron los autores de los goles.
Décimo contra decimoquinto. América de Cali y Atlético Bucaramanga se medían este domingo 20 de septiembre en un duelo de necesitados que ansiaban los tres puntos para tomar aire y aproximar sus aspiraciones.
En este tipo de choques, la tensión y los nervios suelen hacer que las piernas se encojan y el fútbol brille por su ausencia. Y la norma, en lugar de incluir una excepción, se acabó cumpliendo.
Y es que América de Cali se llevó un triunfo por 2-1 que, pese a situar al cuadro 'escarlata' entre los ocho primeros, dista mucho de ser una gran noticia por lo ofrecido durante los 90 minutos.
Bucaramanga entregó desde el primer minuto el balón a su rival y este lo aceptó con gusto, pero sin mordiente. La falta de verticalidad y creatividad hacían que el dominio de la posesión del América fuera totalmente estéril.
Ello condenaba prácticamente el choque al 0-0 cuando ambos equipos enfilaban el túnel de vestuarios, pero Ureña, sobre la bocina, decantaba la balanza para el equipo de Cali antes del descanso.
El gol podía hacer presagiar que el duelo se abriría más y las ocasiones llegarían. Nada más lejos de una realidad que dejó una segunda parte casi con menos ritmo que la primera por culpa del cansancio.
Los minutos pasaban y el 1-0 era la mejor noticia para ambos equipos, ya que uno seguía mandando y el otro se mantenía con vida de cara al tramo final. Pero un gol le amargaba la jugada a cualquiera.
Fue Bucaramanga el que lloró primero, ya que Vergara, de cabeza, parecía sentenciar el choque en el 79'. Sin embargo, Torres, en un chispazo de genialidad de falta, recortaba diferencias en el 84'.
Una reacción tímida y tardía que, poco después, se materializaba en un triunfo que deja al América de Cali en la séptima posición de la tabla, aunque ello no tapa las malas sensaciones del campeón.