Luka Modric sucedió a Leo Messi como el mejor jugador del Mundial. El argentino lo fue en 2014 y el croata tomó el relevo en Rusia. Ambos fueron los mejores del torneo, pero eso no sirvió para que levantaran la Copa del Mundo.
La cara de Luka Modric sobre el escenario del Estadio Luzhniki lo decía todo. Un absoluto poema. No era para menos, Croacia había sido derrotada en la final de un Mundial, la primera para el país balcánico. Como en 1998, Francia fue demasiado para una Croacia que vendió muy cara su piel.
A los de Dalic le fallaron las fuerzas el día menos oportuno. Las tres prórrogas en las piernas resultaron un hándicap imposible de superar. Griezmann, Mbappé o Pogba jugaron su partido y terminaron por alzar al cielo de Moscú una copa que se le resistía a Francia desde 1998.
Pese a la derrota, Luka Modric fue elegido el mejor jugador del Mundial. El 'MVP' en un torneo en el que el balón parado marcó la diferencia. Modric se salió del guión con su habitual talento, mostrándose clave en el organigrama de Dalic. El madridista y Rakitic formaron una dupla sensacional.
De este modo, Modric sucedió en el palmarés a Leo Messi, mejor jugador de la edición de 2014. Otro 'MVP' sin sonrisa, ya que Argentina mordió el polvo frente a Alemania en la prórroga por culpa de un gol de Götze. Aquel día, tampoco hubo consuelo para el astro argentino.
De hecho, desde 1994 no se ve un 'MVP' del equipo ganador. Romario fue el último que logró este doblete, en el Mundial de Estados Unidos. Después llegaron los premios de Ronaldo, Kahn, Zidane, Forlán, Messi y el último, el de un Modric que se quedó con la miel en los labios.