Nigel de Jong fue uno de los jugadores más criticados tras la final del Mundial entre España y Holanda. El centrocampista le clavó la bota a Xabi Alonso en el pecho y, pese a ello, no fue expulsado. A sus 35 años afronta sus últimas temporadas como profesional y lo compagina con un concesionario.
La patada de De Jong a Xabi Alonso en el pecho queda en la historia como una de las acciones más antideportivas que no tuvo el castigo de la roja. Diez años después, muchos se preguntan aún por qué no fue expulsado.
El centrocampista holandés afronta sus últimos años de carrera. De Jong se encuentra en Catar, donde defiende la camiseta del Al-Shahania tras hacer lo mismo con el Al-Ahli.
Sin embargo, esa no es la única profesión de De Jong. El mediocentro es dueño de un concesionario de coches de alta gama en Hamburgo, recordó 'Goal'. Kevin Prince Boateng o Mesut Özil han sido algunos de sus clientes.
Desde Ferrari hasta Lamborghini, McLaren o Porsche, Nigel de Jong ya ha dejado muestra de qué trabajará una vez se retire de forma oficial como futbolista profesional.
Ajax, Hamburgo, Manchester City y Milan vivieron los mejores años de un jugador que, además, ha pasado por las filas de Los Angeles Galaxy, Galatasaray, Mainz 04 y los dos conjuntos de Catar.