En apenas un minuto, la polémica hizo acto de aparición en el derbi valenciano: le anularon un tanto a Coke por un supuesto empujón que no cometió y, en el siguiente ataque, Vietto consiguió el 2-1 tras una sucesión de rechaces.
Este tipo de encuentros siempre crea bastante tensión. Cuando hay alguna acción con los colegiados de por medio, más aún. En esta ocasión, el Levante tuvo bastantes motivos para quejarse.
En un centro al corazón del área, Coke se colocó bien para rematar. Gayà acabó por los suelos y Medié Jiménez decretó falta. El problema es que fue un compañeros suyo, Gabriel Paulista, el que lo mandó al césped.
Casi sin tiempo para reclamarle su equivocación, llegó un contragolpe del Valencia. Hasta en dos ocasiones hubo remates dentro del área. Avanzó Carlos Soler, pero Santi Mina no terminó de remachar. Apareció por ahí Vietto para marcar casi en boca de gol y dar un vuelco al partido.