El presidente de la Federación Checa de Fútbol (FACR), Miroslav Pelta, que se encuentra en prisión preventiva por un caso de corrupción, anunció este marte su dimisión de su cargo, informó la propia federación en su página web.
Pelta, de 52 años y que dirigía el balompié checo desde 2011, debería haber sido relevado del cargo el pasado viernes durante la junta general de la FACR, pero los delegados no lograron ponerse de acuerdo sobre un sucesor.
Pelta fue detenido el pasado 5 de mayo por sospechas de haber inducido a dos altos funcionarios del Ministerio de Educación y Deportes a manejar de manera irregular subvenciones públicas para el deporte, un caso que provocó además la dimisión de la ministra de Educación y Deporte Katerina Valachova
El hasta ahora máximo funcionario del fútbol checo ha impugnado su prisión preventiva, decretada para evitar que influya en los testigos de la causa.
Pelta se encuentra, por motivos de salud, internado en una prisión hospitalaria de Brno, 200 kilómetros al sureste de Praga.
Además de jefe de la federación de fútbol, Pelta es vicepresidente de la Unión Checa del Deporte, la mayor organización del país que agrupa y ofrece servicios a entidades deportivas, y también forma parte del Comité Olímpico Checo (COV).