El dominio con puño de hierro que ha mantenido el equipo de Valverde en la Liga durante la primera vuelta ha provocado que Atlético o Valencia prefieran asegurar las semifinales a seguir soñando con acortar las distancias.
Algo muy extraño tiene que pasar para que esta Liga se le escape al Barcelona. El empate del Atlético y la derrota del Valencia no hacen más que allanarle el camino a un conjunto azulgrana que goza de rentas impensables a principios de curso.
Los dos equipos saltaron a sus respectivos partidos con la mente puesta en la vuelta de los cuartos de final de la Copa que se disputan esta semana. Y ambos lo acabaron pagando. Los rojiblancos dejaron escapar dos puntos ante un buen Girona y los valencianistas hincaron la rodilla ante Las Palmas pese a ponerse 0-1 en el marcador.
Ninguno pudo meterle presión al Barcelona, ni mantener las rentas que consiguieron en sus respectivos partidos. En el Madrid, ya se filtraron unas palabras de Cristiano en las que dejaba claro que el objetivo era ganar la Copa y la Champions.
Este cambio de rumbo es el resultado de la espectacular primera vuelta que ha firmado el equipo de Ernesto Valverde, que sigue sin perder en lo que va de campeonato y esta jornada afronta una de las salidas más complicadas que le restan, el Benito Villamarín.
La Copa, mal menor para la mayoría de equipos, que suelen tenerla como compensación para una mala temporada, ha recobrado una importancia capital este curso. Ante el dominio azulgrana, Atlético, Real Madrid o Valencia tienen claro que la idea de levantar un título pasa por la Copa, torneo que todos ellos han denostrado en otras temporadas ante el avistamiento de objetivos mayores.
En este, las tornas han cambiado hasta el punto de renunciar a la Liga en enero, dando absoluta prioridad a la Copa. Quién ha visto a la Liga y quién la ve... Si el Barcelona logra derrotar al Betis, las diferencias con sus perseguidores superarán los dos dígitos, una distancia sideral para las alturas de curso en las que se encuentran.