El 17% de las tarjetas que muestran a los verdiblancos -que son el segundo equipo de LaLiga que menos faltas comete- son rojas. Ese porcentaje apenas es del 1,9% en el Real Madrid, del 2,7% en la Real Sociedad o del 2,8% en el Mallorca.
El Real Betis es el equipo de las cinco grandes ligas europeas que más expulsiones ha sufrido en lo que va de temporada -un total de 12 en 28 partidos- pese a ser de los que más faltas recibe de todo el fútbol europeo (13,2 por partido) y uno de los que menos cometen, pues en este ranking ocupa el puesto 74º de los 98 que que compiten en las grandes ligas, con una media de 11,1 faltas por partido.
En LaLiga española solo el Real Madrid (282) ha cometido menos faltas que el Real Betis (310). Sin embargo, los madridistas solo han sufrido una expulsión y los béticos acumulan ya doce, y eso que ambos han visto casi el mismo número de amarillas: 51 los merengues y 60 los verdiblancos. El 17% de las tarjetas que los árbitros muestran a los jugadores béticos son rojas -una auténtica barbaridad-, un porcentaje que disminuye al 1,9% en el caso del Real Madrid (una roja y 51 amarillas) y apenas es del 2,7% en la Real Sociedad (2 rojas y 73 amarillas).
Esta última jornada, por ejemplo, Tchouameni no vio ni amarilla (a los madridistas no les mostraron ninguna) por una jugada que, a juicio de todos los analistas arbitrales, estaba entre la amarilla y la roja directa, mientras que Canales vio la roja directa en una jugada en la que la mayoría de analistas -tras revisar la acción, lo que no hizo Cuadra Fernández- se decantaban por la amarilla. Y así, una jornada tras otra, pues los agravios son innumerables.
El equipo que más amarillas recibe del fútbol europeo es el Mallorca, que ya ha visto 103 amarillas y solo 3 rojas (un 2,8% del total). El Sevilla FC, por su parte, es el segundo más tarjeteado, con 95 amarillas y 11 rojas (un 10,7% del total). El Elche lleva 86 amarillas y 11 rojas (12,75). El Barcelona, por su parte, acumula 66 amarillas y 6 rojas (9%) y el Atlético, 71 amarillas y 7 rojas (9,8%).
La relación entre las faltas cometidas y las expulsiones sufridas por el Real Betis tiene difícil explicación, aunque hay una muy sencilla: los árbitros tratan con distinto rasero a unos equipos y a otros, y jugadas casi idénticas son sancionadas de manera muy distinta.
En España los colegiados deben creen que por sacar más tarjetas o expulsar a más jugadores van a tener más autoridad o respeto de parte de jugadores y aficionados, y se están equivocando de plano. Solo en LaLiga española ya van más expulsiones que en la Premier, la Bundesliga y la Serie A juntas. Lo del arbitraje en españa es un auténtico desastre, por mucho que se empeñen desde las altas esferas del CTA en tratar de hacer ver lo contrario.