El Celtic de Glasgow venció cómodamente al Motherwell (3-0), último de la Liga Escocesa. Los jugadores de Neil Lennon hicieron los deberes tras la dolorosa derrota y eliminación en la fase previa de la Champions.
Con la Champions ya a las espaldas, el Celtic debe centrarse en ganar la Liga de Escocia y en clasificarse en la tercera ronda previa de la Europa League. Nada fácil, pero por algo se empieza con el triunfo de hoy.
Los hombres de Lennon cayeron hace unos días frente al Ferencvaros, campeón húngaro que venció ante todo pronóstico por 1-2 a los escoceses, que se quedaron fuera de la Champions. Sin embargo, el Celtic ha sabido reponerse para volver hoy a la acción.
Es cierto que el Motherwell, tras seis jornadas, aún no sabe lo que es ganar. Pero también lo es que el Celtic saltó al campo con un punto más de intensidad para, desde el inicio, ser el dominador del encuentro. El gol, sin embargo, tardaría en llegar.
No fue hasta el 41' cuando McGregor (el futbolista, no el boxeador) asistió de manera mágica a Forrest, que definió con claridad para hacer el 1-0. El Motherwell tuvo algunos oportunidades de acercamiento a balón parado, pero sin excesivo peligro.
Tras el paso por vestuarios, algunos cambios y una oportunidad para Patryck, que tuvo en sus botas el segundo tanto. El Celta tardó en matar el partido, pese a que lo tenía a su merced: fue Ajeti el que colocó el balón con precisión para superar al guardameta rival.
Jullien finiquitó el encuentro con un buen zapatazo. "Me gustó lo que vi durante grandes períodos del juego. Quería una respuesta hoy de los jugadores y obtuve una", señaló Lennon, entrenador del Celtic, tras un partido que sirve a su equipo para levantarse.