La posible venta del delantero Sergio León, máximo goleador de Segunda División la pasada temporada, condiciona la planificación del Elche para el próximo ejercicio, ya que su salida condicionará tanto el número de fichajes como la cantidad de dinero que el club podrá invertir.
El jugador cordobés, cuyo objetivo es jugar en Primera, está en la órbita de varios equipos de esta categoría, aunque todavía no se ha formalizado su venta.
La cláusula de rescisión del contrato de Sergio León, que concluye el próximo 30 de junio, es de dos millones de euros y el club es consciente de que su precio de mercado es inferior a esta cantidad.
Real Betis, Sporting de Gijón, Las Palmas y recientemente Osasuna son algunos de los clubes a los que se ha vinculado al delantero cordobés en las últimas semanas, si bien ninguna oferta ha llegado a concretarse.
El Elche cuenta con un límite presupuestario de 4,2 millones de euros para gastos en su plantilla en el primer y segundo equipo que solo aumentaría si Sergio León es traspasado.
La dirección deportiva tiene en principio la intención de realizar entre cuatro o cinco fichajes. Los objetivos son un portero, dos jugadores polivalentes en la media punta y un delantero, si bien en esta última demarcación tendría que llegar otro efectivo en el caso de que León abandone la plantilla.
Tanto José Luis Molina, director deportivo, como Alberto Toril, entrenador, han afirmado que les encantaría retener en su plantilla al jugador, algo que parece improbable porque el deseo del atacante es competir en Primera.
Lo que sí desean todos los estamentos de la entidad es una rápida solución al caso de Sergio León, ya que si finalmente se produce su marcha el Elche necesitará tiempo y recursos para encontrar en el mercado, cada vez más reducido, un recambio de garantías a su goleador. EFE