El conjunto madrileño sufre la remontada del Leganés (3-2) en el derbi de la capital que cerraba la jornada 34 y que deja al Málaga con la misma distancia con la que arrancó la jornada tras un fin de semana complejo.
Una jornada menos y la distancia sigue intacta con el descenso. Esta jornada era estaba señalada en rojo para el malaguismo y las opciones se han mantenido intactas. Y es que los rivales malaguistas por la permanencia tenían compromisos asequibles, mientras que el Málaga tenía una dura salida en Girona. Sólo el Amorebieta, que ganó el sábado al Ibiza, ha conseguido recortar distancias, pero los seis puntos siguen intactos una jornada más.
Y es que quedaba por conocer el resultado del Fuenlabrada, que de haber ganado en Butarque este lunes noche habría dejado la distancia en cinco puntos. Los de Sandoval arrancaron como un tiro el partido contra el Leganés. Y se pusieron 0-2, con un golazo de Ontiveros y una asistencia y haciendo temer lo peor. Sin embargo, los locales reaccionaron antes del descanso y pusieron el empate nada más volver de vestuarios. Arnáiz, en el 77’, con un tanto de muy bella factura, puso el tanto del friunfo.
Ese gol ha hecho respirar de alivio al malaguismo, que sin embargo ve cómo los rivales de abajo no terminan de conseguir esa regularidad para puntuar y meter en más problemas al Málaga. Ahora, con la llegada de Pablo Guede al banquillo blanquiazul, las sensaciones parecen haber cambiado. Sin embargo, el calendario ofrece pocas concesiones. Y es que este sábado llega el Valladolid a La Rosaleda tras colocarse en posición de ascenso directo. Y la siguiente salida será a Butarque. Mucho por decidir, seis puntos sobre el descenso y 24 aún en juego.