Se puede perder, pero no como perdió el Werder Bremen ante el Stuttgart este domingo. Un error garrafal de la defensa y el portero locales condujo al tanto de la sentencia, obra de Silas Wamangituka, un gol que algunos entienden como innecesariamente provocativo.
¿Y tú qué harías en su situación? Muchos acabarían marcando mucho antes, sin darle tantas vueltas ni perder tiempo. Y otros habrían metido aún más el dedo en la llaga. Así fue el gol que divide a Alemania, y más allá.
El garrafal error de entendimiento entre Pavlenka y Toprak dio pie al gol más polémico que se recuerda en mucho tiempo en Alemania. Silas Wamangituka pescó en río revuelto y dejó el partido visto para sentencia (o eso creía) en el 91'.
Le arrebató el balón al portero como el que le quita un caramelo a un niño, pero en vez de marcar directamente, se fue andando hacia la meta. Quería perder todo el tiempo posible para asegurar la victoria.
Pavlenka hizo el intento de alcanzarle, pero para hacer que marcara de una vez, pues las esperanzas en evitar el tanto eran lógicamente inexistentes.
Su forma de marcar enfureción a Selke, quien se encaró con un Silas que intentó dejarle claro que su intención no era humillar, sino perder tiempo.