El conjunto madrileño confirmó su descenso a la categoría de bronce tras caer por 4-3 este martes en su partido en el Carlos Tartiere ante el Real Oviedo en un partido agónico. El Rayo Majadahonda, de esta forma, jugará la temporada que viene en Segunda División B.
No pudo cumplir el sueño. El Rayo Majadahonda, que iniciaba una ilusionante etapa en Segunda, no logró mantener la categoría. El conjunto de Antonio Iriondo dio la cara a lo largo del curso, pero finalmente tuvo que despedirse de LaLiga 1|2|3.
A falta de una jornada para que la Segunda División llegue a su fin esta temporada, el conjunto madrileño confirmó su descenso. Lo hizo en el Carlos Tartiere ante el Real Oviedo, que acabó siendo su verdugo. Tras un partido frenético, en el que los visitantes llegaron a ir ganando por 1-3, los asturianos le dieron la vuelta al electrónico.
Dependía también de lo que pasar en el Anxo Carro, donde Lugo y Tenerife medían sus fuerzas con el mismo objetivo por el que luchaba el Rayo.
Su juventud en la categoría le ha acabado pasando factura al equipo, que enlazó una muy mala racha en la recta final de la campaña (ocho partidos sin ganar), lo que le llevó a meterse de lleno en la lucha por evitar el descenso en las últimas jornadas.
Aunque en su último encuentro se enfrentaba al Reus -vencerá por 1 a 0-, los tres puntos que conseguirán no les valdrán para seguir teniendo opciones de luchar por su plaza en Segunda.
De esta forma, el Rayo Majadahonda volverá a Segunda División B el curso que viene tras su experiencia en la categoría de plata, donde esperan volver los próximos años.