La Real Sociedad y el Mallorca se ven las caras este fin de semana en un duelo con objetivos muy distintos. En los donostiarras despunta este curso Martin Odegaard, que se reencuentra con el equipo al que batió por primera vez como futbolista 'txuri-urdin'.
Si hay un jugador que ha estado entre algodones esta semana ese es Martin Odegaard. El noruego es la estrella indiscutible de la Real Sociedad. Cualquier molestia es suficiente para que Imanol tome precauciones en los entrenamientos. Y en el de este viernes se ausentó para asegurar su presencia ante el Mallorca.Y es que no es un choque más para él.
Fue precisamente ante el cuadro balear cuando el centrocampista cedido por el Real Madrid se estrenó como goleador del cuadro guipuzcoano. Por eso, el duelo que mide a ambos conjuntos este fin de semana tendrá para él un sabor especial más allá de los tres puntos.
Sucedió en la segunda jornada de Liga. El choque en Son Moix apuntaba a un empate sin goles, pero a siete minutos del final apareció la figura de Odegaard. Manolo Reina salió a los pies del escandinavo, pero este resolvió con un buen disparo.
Así comenzó el particular idilio del jugador con la afición blanquiazul. Desde entonces, suma cuatro goles y seis asistencias en un total de 19 encuentros. Su vuelta al Real Madrid parece un hecho y su sustituto en San Sebastián podría estar precisamente en Mallorca.