El Rostov, rival del Atlético de Madrid en la fase de grupos de la Liga de Campeones, cayó derrotado en el feudo del Terek Grozny (2-1) en partido de la quinta jornada de la Liga rusa en el que volvió a dar muestras de su fragilidad a domicilio.
Este resultado supone su segunda derrota en lo que va de temporada, con lo que pierde un terreno importante respecto a su rival y a los favoritos al título.
No le valió el hecho de haberse adelantado por medio de Ivan Novoseltsev a los 31 minutos, porque el Terek respondió con prontitud y contundencia.
Tanto que le dio la vuelta al partido en un suspiro con los goles del albanés Bekim Balaj (m.33) y del venezolano Wilker Angel. El Rostov incluso jugó los últimos veinte minutos con un hombre menos por expulsión de Alexandru Gatcan.