El Sevilla cerró la primera vuelta de LaLiga Santander con una derrota en Vitoria ante el Alavés (1-0) y llega al ecuador del torneo en sexta posición con 29 puntos, trece menos que en el curso anterior a estas alturas e inmerso en una crisis en la que acumula cinco jornadas seguidas sin ganar.
Estos pobres números, para lo que estaba acostumbrado el Sevilla en las últimas campañas, se pueden clarificar en el dato de que el conjunto andaluz ya ha perdido ocho partidos en la mitad del torneo, los mismos que en todo el campeonato anterior.
En el ejercicio 2016-17, con el argentino Jorge Sampaoli en el banquillo, los sevillistas acabaron la primera vuelta segundos con 42 puntos, tras el Barcelona y por delante del Real Madrid, gracias a trece victorias, tres empates y tres derrotas, con 42 goles a favor y 25 en contra (+17).
La temporada la acabó cuarto clasificado, tras el Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid, con 72 puntos que le dieron sus veintiún triunfos, nueve empates, por solo ocho derrotas, con 69 tantos en su haber y 49 recibidos (+20).
Contraste evidente con las estadísticas de la primera vuelta de esta campaña, en la que en los diecinueve partidos de LaLiga Santander logró nueve triunfos, dos empates y sufrió ocho derrotas, con 23 goles en su haber y 28 en contra (-5).
El equipo nunca ha dado muestras de solvencia desde que inició la competición oficial el pasado agosto con el argentino Eduardo Berizzo al frente de la plantilla, pese a que superó obstáculos, con más pena que gloria, que le tiene actualmente clasificado para los octavos de final de la Liga de Campeones, en cuartos de la Copa del Rey y sexto clasificado en LaLiga.
Ese rumbo perdido motivó que el consejo de administración aprovechara el parón navideño para anunciar la destitución del Berizzo, todo acelerado tras encadenar tres jornadas sin ganar, con el 5-0 encajado en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid, con todos los goles en la primera parte; el empate en casa ante el Levante (0-0) y la nueva goleada en San Sebastián ante la Real Sociedad (3-1).
Berizzo fue sustituido por el italiano Vincenzo Montella, que venía de entrenar al AC Milan, pero en sus dos primeras semanas al frente del equipo tampoco se ha visto la reacción.
El napolitano ha dirigido ya cuarto partidos al Sevilla, con el que debutó en la Copa en el estadio Ramón de Carranza ante el Cádiz y lo hizo con victoria (0-2), al igual que en la vuelta del Sánchez Pizjuán (2-1).
Más exigente fue su primer partido de liga, el derbi como local ante el Real Betis, y acabó de la peor manera con la dolorosa derrota por 3-5, en la que se perdió algo más que tres puntos por la transcendencia que tiene entre los aficionados el encuentro ante el 'eterno rival'.
No mejoró el equipo este domingo en el estadio Mendizorroza, donde perdió 1-0 ante un rival que luchaba por salir de los puestos de descenso y ante el que el Sevilla volvió a evidenciar falta de ideas y recursos tanto en su sistema defensivo como en el ataque.
Con ello ya son cinco jornadas de liga sin ganar, pues el último triunfo se remonta al pasado 2 de diciembre ante el Deportivo (2-0) en el Sánchez Pizjuán.
Montella ha reconocido que deben trabajar mucho para solucionar los evidentes problemas, pero la sucesión de partidos cada tres días entre LaLiga y la Copa sólo le permiten recuperarse de un encuentro y afrontar el siguiente.
Así, el conjunto hispalense juega el próximo miércoles la ida de los cuartos de final de la Copa y lo hace en el estadio Wanda Metropolitano ante el Atlético de Madrid, complicada cita a la que acude en el peor momento de la temporada.