Con 1-2 en el marcador y bastante sufrimiento para su equipo, que se quedó con uno menos por la expulsión de Cristiano, Asensio volvió a enamorar al madridismo con otro de sus goles salvadores.
El 20 del Real Madrid volvió a salir desde el banquillo en una final y volvió a brillar. Esta vez se comprometió a anotar un tanto que acabó siendo definitivo para el cuadro de los de Zidane.
Rozando el tiempo de descuento, el cuadro blanco, esta vez de verde, trazó una contra genial que culminó el centrocampista con un disparo potente, desde la línea del área, que rebotó en el larguero antes de besar las redes.
El gol, según pudo verse poco después en la repetición, hizo vibrar al mismísimo Florentino, que lo celebró en el palco casi como un aficionado más.