Las buenas sensaciones del equipo y la afición 'che' tras la victoria ante los de Zidane, se han esfumado en apenas 10 minutos, que es el tiempo que ha tardado el conjunto de Pellegrino en darle la vuelta al marcador.
Parece que lo del Valencia en Mestalla del miércoles pasado fue un espejismo. El hambre con el que salieron a morder los jugadores 'che' frente a los de Zidane no se vio en ningún momento en el choque ante el Alavés.
Los primeros momentos del encuentro fueron un intento constante de ambos equipos por hacerse con el control del partido. En los primeros 45 minutos, una ocasión de Soler y un par de ellas de Manu García fueron lo más interesante.
Tras la reanudación del choque, los de Pellegrino salieron con ganas para intentar adelanterse en el marcador y casi lo consiguen con tres intentos de, nuevamente Manu García, y de Rubén Sobrino, que había entrado en la segunda mitad.
Pero para sorpresa de los aficionados de Mendizorroza, el que acabaría poniendo el primer gol en el marcador sería el Valencia. Carlos Soler fue el autor del tanto, al recoger un rechace tras una buena parada de Pacheco tras falta de Parejo.
Con el 0-1 en el marcador, los de Pellegrino no se vinieron abajo, al contrario, intentaron con más ganas todavía conseguir el empate. Y ocho minutos después del gol de Soler, Ibai ponía el 1-1 con un tremendo disparo imparable para Diego Alves.
El Alavés seguía en su intento por hacerse con el partido con un Valencia perdido en el campo. En el minuto 86, el recién entrado en el campo, Katai conseguiría hacer realidad la remontada alavesista.
Los minutos finales del partido fueron un quiero y no puedo del equipo de Voro, que veía como sus opciones de rascar un punto de Mendizorroza se alejaban aún más con la expulsión de Orellana en el minuto 88.
Así acabo el partido, con una importante victoria del Alavés, que rompía una racha de 62 años sin ganar al Valencia y con el conjunto de Voro recordando al equipo de antes del choque ante el Real Madrid.