El entrenador del Sevilla, Unai Emery, ha manifestado tras la clasificación de su equipo para los octavos de final de la Liga Europa que "el primer objetivo del partido era pasar de ronda" pero que "el resultado", la derrota por 0-1 en el campo del Molde noruego, lo "ha dejado contrariado".
Emery, en la sala de prensa del Molde Stadion, ha lamentado que el Sevilla había "controlado el partido" pero la "falta de acierto se ha visto penalizado con su gol" y que "quería ganar", por lo que "no hacerlo tiene que doler" aunque ha reiterado que "la clasificación está por encima de todo".
"Tenemos que ser competitivos y vamos a seguir trabajando con los jugadores. Lo que me duele es perder. Hoy, con más acierto, habríamos tenido el marcador a favor. Tenemos que ser críticos porque hay que arreglar cosas para ser más sólidos", ha explicado.
El técnico vasco no ha querido buscar "ninguna excusa como el frío o el césped -artificial-" porque ha recordado que el Sevilla había "ganado el año pasado en San Petersburgo", de modo que se marcha de Noruega con "el mal sabor de perder".
Sin embargo, el preparador sevillista pretende "reforzar al grupo" con "las cosas positivas" que deja esta clasificación que lo aboca mañana viernes a un sorteo en el que estará "conforme con lo que toque, porque lo importante es estar".