¿Extremos clásicos o a pierna cambiada?

Carlos Sanchez-Lafuente hace 7 años 2.4k
El holandés Robben es uno de los extremos más destacados del mundo. AFP

La lógica del fútbol dice que los futbolistas de banda deben jugar en sus lados naturales en función de su pierna dominante con el objetivo de ampliar al máximo el campo y crear espacios, pero existen casos en los que esta premisa no se cumple.

Los futbolistas que juegan en la posición de extremos suelen tener unas características muy específicas de velocidad y desborde. Los extremos clásicos solían jugar en las bandas que, de manera natural, les correspondían por su pierna dominante. Con estos jugadores se buscaba abrir el campo lo máximo posible para crear espacios, profundizar hasta línea de fondo y buscar, con centros, al delantero. 

Sin embargo, existe un tipo de futbolista, que por su gran calidad en la conducción de balón, dribbling y acierto de cara a gol, arranca desde la posición de extremo, pero a pierna cambiada, es decir un zurdo que juega en la derecha o viceversa. Es el caso de estrellas como Bale, Robben, o en su momento, Cristiano Ronaldo. 

Esta posición les permite sacar el máximo rendimiento al magnífico desborde en el uno contra uno y, al salir del regate, poder encarar portería para golpear con su pierna buena. En cuanto al plano colectivo, las conducciones hacia el interior ofrece la posibilidad de crear espacios en banda para la subida del lateral y así poder crear situaciones de superioridad en banda.

Claro está, esta manera de jugar depende por completo del tipo de futbolistas que posea el equipo. Lo primero es contar en la plantilla con una jugador rápido y técnicamente muy bueno. Por otra parte, en el caso de contar con un 'killer' en la posición de '9', un rematador puro, quizás la mejor opción sea la de jugar con extremos clásicos que sirvan buenos centros al delantero centro. 

La de extremo es prácticamente la única posición en la que se ve este tipo de variantes. Es muy difícil, salvo por cuestiones físicas, que en defensa o centro del campo jueguen futbolistas en lados contrarios a los que serían los naturales. De hecho  los extremos a pierna cambiada suelen ser futbolistas que gozan de libertad de movimientos debido a que en cualquier jugada pueden resultar determinantes para sus equipos. 

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