Para Carlos Tévez, volver a Fuerte Apache es volver a su casa. Es uno de los barrios más azotados por la delincuencia y el narcotráfico de Buenos Aires, pero para el jugador de Boca siempre es especial regresar y así lo dejó claro en una entrevista para el medio 'Clarín'. Fue el mejor pagado en 2017 (38 millones anuales), pero sigue siendo el mismo chico humilde.
'Carlitos', quien toma el apodo 'Apache' concretamente por el barrio en el que creció, regresó de la mano del citado medio a las calles de su infancia. Estas, medio derruidas, vieron jugar de pequeño a Tévez con la pelota y ahora le ven paseando como un auténtico ídolo de Argentina, pero el delantero no ha cambiado desde entonces.
"La vida me puso en un lugar de ídolo y no puedo estar apartado de la calle. No vengo aquí sólamente a mostrarle a mis hijos cómo vivía su papá, vengo porque soy feliz acá. Como asados, tengo mi familia, mis amigos... este es mi lugar en el mundo", afirma el jguador de Boca.
Para Tévez, Fuerte Apache plasma la realidad de buena parte de la sociedad argentina: "La verdad está acá, esta es la verdadera calle. En el Fuerte se ve cómo está la gente".
Echando la vista atrás, recordó su infancia: "Fue dura, sí, pero éramos felices. Estábamos jugando a la pelota hasta que nos agarraba hambre. Cada partido era la vida. Cuando tenía 12 años la 'rompía' toda, no me podían parar. El barrio era bravo, pero se podía jugar todo el día en la calle. Se vivía lo que se vive en los barrios marginales, había droga, armas, robos...".
Por último habló de política y aseguró que él no se casa con nadie. "Podemos hablar de política, que no nos pondremos de acuerdo porque mientras habrá gente cagándose de hambre. Los argentinos perdemos tiempo en discutir y no hacemos nada por los chicos que se cagan de hambre. Como ídolo no me puedo colgar banderas políticas, si me llama un político para dar la mano, ahí estoy, pero si sabemos que el país está mal, hagamos algo", fueron sus palabras para 'Clarín'.