El técnico malaguista pone camino hacia México esta noche tras una semana intensa de trabajo donde ha avanzado en la confección de la pretemporada y de la próxima plantilla. Estará en contacto continuo con Manolo Gaspar.
Pablo Guede hace un impás veraniego. El técnico malaguista se marcha esta madrugada hacia México, donde tiene la mayoría de sus pertenencias tras haber desarrollado sus últimas etapas como entrenador en el país centroamericano antes de recalar en Málaga deprisa y corriendo. Lo hace tras una semana intensa de trabajo en las oficinas de La Rosaleda después de un final de temporada intenso. Un paso al lado para recuperar fuerzas para todo lo que está por venir.
Y es que aunque Guede se marche, el contacto con Manolo Gaspar será continuo vía telefónica para seguir confeccionando la plantilla blanquiazul del próximo curso. Durante esta semana las reuniones han sido habituales en Martiricos con el director deportivo. El objetivo era perfilar el futuro Málaga. Y aunque no se han conocido nombres, ambas partes ya tienen una idea de por dónde acometer el proyecto.
Guede ya estuvo reunido al comienzo de la semana de manera individual con la mayoría de los jugadores antes de que emprendieran su camino de vacaciones. A cada uno le comunicó su situación y lo que espera de ellos para el próximo curso. El caso más llamativo fue el de Peybernes, al que le expresó su idea de no contar con él o de que será el último en la rotación si acaba quedándose en Málaga.
No ha sido el único foco de acción de Manolo, que también ha estado preparando la pretemporada codo con codo con Josemi, el delegado del equipo. El técnico quiere un verano intenso con muchos partidos. Se arrancará el 4 de julio con el grueso de la plantilla, pero habrá algunos jugadores que incluso arrancarán antes de manera individualizada, como los canteranos. El grueso será en tierras malagueñas, pero se estudia hacer una estadía fuera de Málaga. Lugares, rivales, itinerarios… Todo eso se ha tocado estos días.
También algunos nombres propios, como la llegada de Manolo Reina, el caso Febas, o el lío a tres bandas con Ricardo Horta, donde el Málaga podría ingresar un buen pellizco fundamental para su economía de guerra.
El técnico también ha ofrecido varias entrevistas estos días. En una de ella admitía que las cosas no se han desarrollado como él quería, pero espera la mejor versión del Málaga el próximo curso. “En los peores momentos es cuando sale lo mejor de mí. Lo tengo clarísimo. En mi carrera se puede ver. A la gente no le puedo decir nada. Sólo trabajar y ver lo que pasa el año que viene. Lo que diga puede sonar a excusa. Yo conozco el camino que es el trabajo. Ahora con la pretemporada, con una plantilla, podré hacer lo que pienso como entrenador”, explicó Guede como aviso a navegantes.
El técnico, que también tendrá tiempo para descansar y recargar pilas entre mudanza y viajes, estará de vuelta en Málaga posiblemente para la semana del 22-23 de junio, para retomar ya la actividad malaguista.