El Tottenham y el Inter protagonizaron un encuentro muy igualado en el que Conte acabó superando a Pochettino en el plano táctico conforme avanzaba el tiempo. En un principio, los 'spurs' dominaron con mucha calidad el centro del campo, pero los italianos fueron de menos a más. El encuentro se resolvió en la tanda de penaltis en favor de los 'nerazzurri'.
Los locales salieron superiores a sus rivales en todas las facetas del juego. Destacó el control en el centro del campo que consiguió Pochettino alineando a Winks, Ndombele y Sissoko en la medular del terreno de juego. Ello comportó que, en los primeros compases, los italianos se echaran atrás.
Lucas Moura marcó muy temprano el primer tanto del partido tras una contra incisiva de su escuadra. Lamela fue el encargado de asistirle desde la frontal del área para que recortara ante Skriniar y fusilara a Handanovic con un zapatazo con la zurda. Desde entonces, el Inter comenzó a reconstruirse.
Los de Conte fueron de menos a más muy poco a poco. Sus principales problemas fueron las rápidas recuperaciones que protagonizaban los ingleses en la zona medular y su velocidad a la hora de montar contras. Aun así, consiguieron generar cada vez más peligro de forma tímida.
Los 'spurs' concedieron más tiempo la posesión a sus contrarios y estos aprovecharon uno de sus periodos con la pelota en los pies para marcar. Esposito dejó solo ante Lloris a Sensi con una espectacular asistencia con el exterior del pie y el centrocampista definió tranquilamente y a placer.
En la segunda mitad, los conjuntos se respetaron más que en la primera y no comenzaron a generar ocasiones claras hasta el minuto 60. Lamela lo intentó desde la frontal y Perisic dio la réplica desde dentro del área, pero ninguno de los dos logró marcar. Los 'nerazzurri' estaban mejor conforme pasaba el tiempo y el cansancio hizo que los 'spurs' no pudieran orquestar contras tan rápidas.
En la recta final del encuentro, las espadas se mantuvieron en todo lo alto, pero ninguno de los cuadros logró llevarse el gato al agua. Son tuvo la mejor ocasión con un disparo cercano que Handanovic detuvo con unos buenos reflejos. Eso sí, el atacante chutó demasiado al centro, facilitando la detención del cancerbero.
El encuentro se tuvo que resolver en la tanda de penaltis, en la que los de Conte se impusieron después de que Handanovic parara el disparo ajustado de Skipp y Mário hiciera los deberes. Se trató de una gran prueba entre dos escuadras que mostraron un muy alto nivel y la contienda desde los once metros decantó la balanza en favor de los visitantes.