Islas Feroe, creciendo lentamente en Europa
Las Islas Feroe, una pequeña nación de apenas 50.000 habitantes que nunca ha jugado una fase final, se presentan con Malta como el rival más débil del grupo F de clasificación para la Eurocopa 2020.
Aunque forman parte del Reino de Dinamarca, las Feroe -un archipiélago situado entre Escocia e Islandia- compiten desde hace menos de tres décadas como selección independiente y sus resultados se han ajustado a sus limitados recursos y la ausencia de una competición profesional.
Habituada a quedar siempre última o penúltima en su grupo de clasificación, en los últimos años ha experimentado no obstante progresos de la mano del seleccionador Lars Olsen, uno de los héroes de la Eurocopa que Dinamarca ganó contra pronóstico en 1992.
Si en la clasificación para Francia 2016 las Feroe lograron derrotar sorprendentemente en dos ocasiones a Grecia, en la del último Mundial batieron su récord de puntuación, una marca que fue celebrada como una gesta.
Las Islas Feroe sumaron nueve puntos y acabaron cuartas en un grupo de seis, con un triunfo en Riga y un empate contra Hungría como resultados más destacados.
En la recién finalizada Liga de Naciones, en la categoría más baja, las Feroe solo pudieron sumar un triunfo (contra Malta en su casa) y dos empates (en Malta y en casa frente a Kosovo, vencedor del grupo), y acabaron penúltimas.
La Selección Feroesa está formada en su mayoría por jugadores semiprofesionales que compiten en su país, en categorías modestas del fútbol danés o en la liga islandesa, como el centrocampista ofensivo Brandur Hendriksson, formado en el Copenhague y el jugador más talentoso de un equipo esforzado pero muy limitado.
Uno de sus mayores activos es Tórsvøllur, su estadio nacional (con algo más de 6.000 localidades), donde las Feroe gozan siempre del apoyo de un público muy entusiasta y orgulloso de que las islas cuenten con una selección propia pese a su pequeño tamaño y a que forman parte del Estado danés.
Las Feroe se han enfrentado dos veces a España, en la fase de clasificación para el Mundial 1998, con dos triunfos españoles en los que marcó Luis Enrique: un gol en el 2-6 en Tórshavn y dos en el 3-1 en Gijón, su tierra natal.