Johan Mojica ya cuenta 100 partidos como jugador de Primera División. El colombiano alcanza este hito de la mano del Villarreal, el proyecto español más ambicioso del que ha formado parte hasta ahora. Con cuatro temporadas por delante en su contrato, aspira a ser importante en andanzas europeas. BeSoccer Pro examina su trayectoria en la élite.
Cada jornada tiende a agrupar una serie de efemérides interesantes y, este fin de semana, Johan Mojica fue protagonista de una de ellas. El lateral del Villarreal alcanzó los 100 partidos en Primera División. Se trata de una muestra de cómo se ha asentado en el fútbol nacional, donde representa el talento colombiano en un momento de máxima ambición. BeSoccer Pro le analiza.
En los últimos años, está dando forma a un perfil más ofensivo del que lleva ya mucho tiempo advirtiendo. Aunque la presente temporada aún es escasa, ya da para arrojar unos datos que lo demuestran. Ha aumentado su ratio de pases claves, con 0.75 por 90 minutos (eran 0.7 en la 21-22 y 0.23 en la 20-21), de regates con éxito (3.24 vs 2.38 y 2.6) y de duelos ofensivos ganados (4.61 vs 3.6 y 3.67).
Esto no le priva de seguir siendo fiel a sus labores originales, las de recuperar la pelota. Garantiza 2,62 recuperaciones de pelota en campo rival por 90 minutos, una muesca más de cómo se le está viendo cada vez más adelantado en el terreno de juego. En la campaña pasada, robaba 1,74 cueros por 90 minutos en el terreno contrario y, en la 20-21, 2.32.
Evidentemente, esto implica un menor cuidado en los asuntos propios de un defensa y las estadísticas de BeSoccer Pro permiten comprobarlo. Ha reducido considerablemente su incidencia en pases progresivos con éxito (de 8.1 en la 21-22 y 7.63 en la 20-21 a 5.86 en la 22-23), en duelos defensivos ganados (de 4.34 en la 21-22 y 5.03 en la 20-21 a 2.99 en la 22-23) y en intercepciones (de 0.67 en la 21-22 y 0.68 en la 20-21 a 0.37 en la 22-23). En conclusión, participa menos del juego desde atrás tanto en construcción como en destrucción.
Un gran recurso al que acudir para estudiar cómo ha ido haciéndose más ofensivo, si bien esta es una dinámica que se le intuye desde los primeros años de su carrera, es su mapa de calor. Nótese su elevada presencia en el campo rival. Concretamente, en cómo se dibuja una especie de círculo apurando la línea de fondo, donde acude para generar superioridades y disponer centros.
La aventura de Johan Mojica con el Villarreal acaba de comenzar, así que es conveniente estudiar los datos de sus anteriores destinos españoles para dar forma a unos registros básicos de su trayectoria. Este tipo de números ayuda a comprender su trascendencia en cada plantilla o a si es muy dado a marcar, asistir o salir más de inicio que como revulsivo.
En el Rayo Vallecano, su primer escudo en Primera, disputó 12 encuentros de los que fue titular en siete -sin goles ni asistencias, pero con dos tarjetas amarillas-. Hay que tener en cuenta que engrosó estos números en Segunda, pero el hito que ocupa esta noticia es el de su centena de actuaciones en la élite, conque este apartado se acotará tan solo a esos enfrentamientos.
Con el Real Valladolid, segundo destino español de su carrera, no llegó a jugar en Primera. Con el Girona, en cambio, lo hizo en 31 ocasiones, 22 de ellas de inicio, con cuatro asistencias y seis amonestaciones. De la mano del Elche, participó en 53 con 49 titularidades, nueve tarjetas amarillas, dos goles y cinco asistencias.
Queda claro que el Girona y el Elche son los equipos que dan forma al grueso de su trayectoria en Primera. Ahora, con el Villarreal, pasa por un momento importante; puede que el más notorio de su vida futbolística. Aspira a ser trascendente en competiciones europeas -ya sabe lo que es disputar la Conference League- y a ayudar a los 'groguets' a estar entre los nobles de la categoría.