Pese a que Kiev trae buenos recuerdos a la afición madridista, ahí levantó el Real Madrid la Champions de 2018 ante el Liverpool, también existen momentos delicados, como la derrota ante el Shakhtar en diciembre de 2020 que puso por primera vez a Zidane en el alambre en su segunda etapa como entrenador 'merengue'.
Karius y Gareth Bale. Dos nombres que juntos llevan directamente a la ciudad de Kiev, capital de Ucrania, donde este martes el Madrid visitará al Shakhtar Donetsk en una nueva jornada de Champions League. Un lugar que podría definirse como el sinónimo y el antónimo de felicidad en la entidad del Bernabéu.
Comenzando por la parte positiva, ahí fue donde el equipo de Zidane, entrenador en aquel momento, levantó la UCL de 2018. Golazo de Bale, cantada de Karius. Dos nombres, dos momentos que condicionaron el devenir del duelo.
Fue la tercera vez consecutiva que los 'merengues' levantaban la máxima competición continental, aunque esa alegría duró hasta que ese verano Cristiano Ronaldo, una de las mayores figuras de la historia del club, decidió abandonar el equipo para fichar por la Juventus, algo que dejó caer al finalizar el partido contra los 'reds'. También dijo adiós 'Zizou' para poner fin a su primera etapa como técnico blanco.
De la felicidad a la tristeza más absoluta. Así pudo catalogarse la visita del Madrid al Shakhtar a Kiev en diciembre de 2020, cuando los ucranianos doblegaron por 2-0 a los 'merengues' en la fase de grupos de la Champions League. Tras esa debacle, Zidane, en su segundo ciclo en el banquillo madridista, empezó a estar en el foco de las críticas.
Los resultados siguientes no acompañaron al galo, que finalmente recuperó fuerzas mediante triunfos de nivel para calmar las aguas en la capital. Sin embargo, volvió a despedirse del equipo al que hizo campeón de Europa en Glasgow por segunda vez. Kiev es la cara y la cruz. Este martes habrá qué ver el lado que le sale al Real Madrid de Carlo Ancelotti.