La conexión Griezmann-Mbappé noqueó a Dinamarca y dejó los octavos atados

BeSoccer hace 1 año 4.2k
Mbappé marcó para Francia. Captura/GolMundial

Un centro genial de Antoine Griezmann al segundo palo y un remate de circunstancias de Kylian Mbappé valieron para que la Selección Francesa marcara el 2-1 contra Dinamarca en la fase de grupos del Mundial de Catar. El delantero del PSG y el extremo del Atlético de Madrid aparecieron cuando tan solo quedaban unos cinco minutos para el término del tiempo reglamentario y dejaron los octavos de final atados.

Los 'cracks' aparecen en las citas grandes, cuando más se les necesita, y Antoine Griezmann conectó con Kylian Mbappé para demostrarlo en la fase de grupos del Mundial de Catar. Cuando quedaban alrededor de cinco minutos para el término del tiempo reglamentario en el partido de Francia contra Dinamarca, destellaron para dejar sin efecto un tanto que había anotado muy poco antes Christensen para sus rivales.

El extremo del Atlético de Madrid recibió la pelota de cara en la banda derecha, la orientó y dispuso un centro al segundo palo teledirigido hacia la posición del delantero del Paris Saint-Germain. Este, tras superar al defensa que tenía más cerca, se elevó y se hizo todo lo grande que pudo para rematar de cualquier manera. La bola, de hecho, dio bien en su torso, en su muslo o en su entrepierna, pero el caso es que se convirtió en el 2-1.

El punta, lleno de euforia, saltó la valla de publicidad de la zona del campo desde donde le había asistido 'Grizzy' para celebrar con sus aficionados la diana. Después, con rostro serio, regresó al césped, donde sus compatriotas le esperaban para agasajarle con abrazos y gestos de cariño. Las clásicas collejas se repartieron por doquier a una estrella que fue diferencial un día más con otros hombres clave como Benzema lesionados.

Este gol de Mbappé se revisó brevemente desde el VAR por un posible fuera de juego, pero la tecnología semiautomática refrendó que el '10' se salvó porque Kristensen, el zaguero que le cubría, tenía extendido el brazo izquierdo hacia la portería y, además, estaba unos centímetros más cerca. Gracias a esto, la posición de su contrincante se dio por válida y, como consecuencia, su tanto también.

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