El técnico uruguayo Gerardo Pelusso, que el pasado año dirigió al Al-Arabi de Catar, dijo hoy que para entrenar en el fútbol de ese país hay que estar dispuesto "a convivir con la mentira y el engaño" porque los clubes siempre intentan no pagar el salario acordado.
"Cuidado, no es lo que te pintan y si vas a trabajar allí tienes que convivir con la mentira y con el engaño. Si soportas a los mentirosos y a los que te están tratando de engañar todo el tiempo, porque es su forma, su cultura, hasta se divierten de esa manera, andá allá, si no lo soportas, cuidado", declaró Pelusso en una entrevista con el medio local El País TV.
El técnico, que en 2015 ganó la Copa Sudamericana con el colombiano Independiente Santa Fé, puntualizó que esa forma de actuar no solo se corresponde con la de los clubes de Catar, sino también con la de otros países de ese entorno como Emiratos Árabes y Arabia Saudí.
"El modus operandi es más o menos el mismo", aseveró.
Pelusso afirmó que en el 80 ciento de los casos los clubes de esa región no pagan los contratos.
"Son muy pocos y puntuales los casos que sí te pagan. Ellos buscan la vuelta para eso: 'tengo el dinero, soy tu amo, eres mi esclavo, aquí hay que hacer lo que yo te digo y además voy a tratar de no pagarte'", declaró Pelusso.
El entrenador dijo saber que las cosas "eran difíciles" en esos países pero que las ofertas que hacen "tientan" a quienes las reciben y que, en el caso concreto de su experiencia en Catar, también pensó en el beneficio económico del equipo técnico que le acompaña, formado por siete personas.
Respecto a su salida de Catar, comentó que "fue difícil" porque para abandonar el país hay que recibir un permiso y que el club quería que él firmara un documento que dijera que habían rescindido el contrato de común acuerdo, algo a lo que se negó.
"En los países árabes no existen los derechos humanos, cada país tiene sus reglas y sus jefes", exclamó al respecto.
"Y todo esto que estoy contando es verdad absoluta", aseveró.
Por todo ello, el técnico dijo haber pasado un último curso "frustrante, amargado y triste" y haber decidido, de momento, pasar un año sabático sin entrenar.