El Manchester City no pudo pasar del empate en su duelo en casa ante el West Bromwich Albion y Pep Guardiola terminó desesperado, incluso con el cuarto árbitro al ver el tiempo añadido.
La Premier no baja el ritmo y poco a poco el Manchester City se deja más y más puntos. Solo pudo sumar uno en la visita del West Bromwich Albion y ya se quedó a cinco de Tottenham y Liverpool, líderes en la clasificación.
Un duelo en el que el City comenzó por delante en el marcador gracias al 1-0 de Gündogan, pero el tanto en propia puerta de Rúben Dias complicó la papeleta más de lo previsto.
Por ello, en los últimos minutos se vio a un Pep Guardiola más agitado de lo normal. No paró de dar órdenes y expresó su indignación al ver el tiempo añadido por el colegiado.
Al ver la tablilla del cuarto árbitro y los cuatro minutos, el entrenador se dirigió al asistente para pedir explicaciones. Incluso se atrevió a sujetar el cartelón. Una imagen que dejó la anécdota divertida de la jornada de martes.