La lágrima de una generación

Miguel Moreno hace 5 años 31.9k
Un fin de semana para decir adiós. BeSoccer

Este no es otro fin de semana más. No es el típico final de temporada. Cuando termine el domingo y Europa eche el telón al año futbolístico, el mundo llorará tres despedidas. Tres adioses que, en parte, marcan el natural -y no por ello menos desgarrador- relevo generacional al que está condenado el fútbol. Andrés Iniesta, Gianluigi Buffon y Fernando Torres se bajarán de sus barcos, dejando en ellos grandes legados.

El paso del tiempo es inevitable hasta en algo tan eterno como el fútbol. La edad es lo único que hace finitas a las leyendas y este mayo de 2018 viene cargado de lágrimas. Del llanto de aquellos que crecieron con el fútbol de la primera década del 2000. De aquellos que fueron amaron a las estrellas antes de que un argentino y un portugués eclipsaran a cualquier astro que pretendiera brillar más que ellos. 

La de este fin de semana es una cita inolvidable para esa generación. Invadida de tristeza por despedir a los ídolos con los que crecieron, dirá adiós a tres jugadores que llevan el escudo del equipo de sus vidas grabado en sus corazones y que han levantado cariño y admiración hasta lejos de sus estadios.

El '8' infinito

Lo más difícil será despedir a Andrés Iniesta. El '8' de su espalda se giró 90 grados para formar el símbolo de infinito nada más anunciar su marcha del Barcelona. Lo hizo entre las lágrimas de quien ha dado su vida por el mismo club desde que comenzara, en 2002, su carrera en el fútbol de élite. 16 años después escribirá su último episodio el domingo en el Camp Nou ante la Real Sociedad.

No sólo las manos azulgranas se moverán de un lado a otro para decirle adiós al ya eterno capitán azulgrana, lo harán las de toda España, agradecida para siempre por ese gol que le regaló a más de 45 millones de personas una Copa del Mundo. Iniesta es y siempre será del Barcelona, pero una pequeña parte de él se queda en todos los aficionados del fútbol español, sean cuales sean los colores de las camisetas que vistan.

Porterías huérfanas

Gianluigi Buffon ha sido uno de los grandes ejemplos a seguir para cualquiera de los jóvenes porteros que despuntan actualmente. Fue el guardameta más caro de la historia en 2001 y ahora, habiendo llegado a la cuarentena tras 17 años viviendo un sueño en la 'Vecchia Signora', dice adiós este sábado, en casa, ante el Hellas Verona.

Su capacidad de estar colocado siempre en el lugar oportuno, sus reflejos y sus paradas increíbles no se saldrán de las retinas de quienes hayan visto al mejor Buffon. Tampoco la intensidad con la que vive cada partido, ese amor incondicional por un escudo que antepuso a todo durante su carrera. Nueve 'Scudettos' y una Copa del Mundo con Italia, entre otros títulos, le hacen eterno. Este sábado, todas las porterías del mundo se sentirán un poquito huérfanas.

Volver para siempre

El Wanda Metropolitano despedirá este domingo a un 'Niño' convertido en padre de cualquier atlético. Los seis años en los que ese chaval de la cantera se coronó referente de la familia rojiblanca antes de marcharse a Inglaterra mitificaron a un Torres que desde el momento en el que se marchó pensó en volver.

Regresó a la ribera del Manzanares en 2015. Aunque no en su mejor momento, lo ha dado todo semana tras semana. Disfrutando cuando le ha tocado jugar, y callando cuando sentía el frío del banquillo. El premio ha llegado tarde, pero ha llegado en forma de título europeo, el primero de su carrera en el Atlético. El que ha provocado que pese a haber pasado poco más de dos años y medio desde su regreso, Torres haya vuelto para siempre.

Mencionados en la noticia