Matthijs de Ligt, uno de los futbolistas más codiciados para este verano, tiene muchos argumentos a los que agarrarse para firmar por el Barcelona, pero también hay otros poderosos para decantarse por alguna de las otras ofertas.
De Ligt tiene mareado al Barcelona. Lo ve capital en su planificación, pero el futbolista no termina de tomar una decisión. De hecho, ha vuelto a dilatarla. Pero, ¿qué atrae y separa al holandés del Camp Nou? Motivos hay de sobra.
Una de las grandes razones es un positivo efecto colateral del fichaje de De Jong. Ambos jugadores son uña y carne, y De Ligt ya declaró alguna vez que quería seguir jugando junto a su íntimo amigo. Sería un reto precioso vestir el azulgrana de la mano.
Por supuesto, otro de los argumentos más poderosos que maneja el Barça en cualquier negociación es la seducción que produce jugar de la mano de Messi. Además, en su caso no solo sería su compañero de equipo, sino que sufrirlo en los entrenamientos supondría un máster diario para el joven jugador.
Y si Messi puede enseñarle desde ese prisma, Piqué, uno de los centrales a los que más admira el Golden Boy, también podría adiestrarle a su vera.
Luego está el ADN holandés del Barcelona. El influjo de Johan Cruyff siempre ha conectado al club azulgrana con Holanda, y concretamente con el Ajax, con el que el trasvase de futbolistas ha sido continuo. De Ligt sabe que sería vital para hacer más fácil su adaptación al nuevo entorno.
La mejor Liga del mundo, o al menos esa es la idea mayoritaria que se tiene en Holanda, supone otro reclamo que tienta al zaguero del Ajax. Está en edad de aprender, pero también de divertirse. La alta competitividad en España más allá del duopolio de Barça y Madrid podría terminar de desnivelar la balanza.
No todo pinta también
Pero otros motivos importantes juegan en contra de los intereses del Barça. El principal, el agente del futbolista, Mino Raiola, más ahora que se le ha levantado cautelarmente su sanción.
El polémico representante espera que su futbolista se vaya al club donde más dinero se mueva. A mayor cantidad de traspaso, mayor cantidad para Raiola. Y los azulgrana no son precisamente los que pondrán más dinero sobre la mesa. De hecho, ya se han plantado con su última oferta.
Ni en cuanto al traspaso ni con respecto al sueldo que percibiría el futbolista. Luchar contra el italoholandés suele ser una tarea muy agotadora, tanto en cuestión de esfuerzos como en lo financiero.
Igualmente, opciones como la de la Juventus o el PSG parecen garantizarle a priori más opciones para ser titular desde el minuto 1. En el Barça quizá tendría que ir más profresivamente. Las necesidades de los competidores del Barça le cerraría las puertas en ese sentido.
El miedo al salto al vacío es otro tema a analizar. De Ligt, que se muestra muy maduro siempre en sus declaraciones, podría optar por una solución de salida intermedia mientras llega a sus años de madurez, momento en el que preferiría irse a un club como el Barcelona, donde todo lo que no sea ganar suele resultar un fiasco.