Quique Hernández, ex entrenador y nuevo presidente del Hércules, afirmó este martes que acceder a la dirección del club es un orgullo y una gran responsabilidad, ya que recordó la importancia de la institución en la sociedad alicantina.
"Para mí ser presidente del Hércules es un orgullo y supone mucha responsabilidad", dijo el valenciano, quien ha sido el entrenador que más partidos ha dirigido al equipo alicantino a lo largo de su historia.
Hernández, que entrenó al equipo en tres etapas, dijo que llega al Hércules para "trabajar en equipo" y dispuesto a "aportar todo lo que requiera para hacer el club".
El nuevo presidente destacó que el gran reto que acomete es "devolver al Hércules al fútbol profesional", así como "dotarle de una estructura a medio plazo de cantera".
En cuanto a la trayectoria del equipo, hundido en la zona media de la tabla y sin entrenador, Hernández recordó que "la Liga no ha terminado".
"Estos jugadores han demostrado a lo largo de su trayectoria que son mucho mejores de lo que hemos visto y estamos para ayudar", explicó el valenciano, quien aclaró que, pese a su pasado como entrenador, no piensa entrar en las cuestiones deportivas.
"Hay un entrenador y un director deportivo, y los que estamos en el consejo estamos para ayudarles", señaló el presidente, quien admitió que la posibilidad de acceder al palco era algo que llevaba un tiempo en su pensamiento.
"He estado muy bien de entrenador, me ha gustado ser director deportivo y espero poder decir lo mismo con el paso del tiempo de la labor como presidente", concluyó.
Juan Carlos Ramírez, anterior presidente de la entidad, justificó su decisión de abandonar el cargo al señalar que el Hércules necesita a alguien pendiente de su "día a día", algo que a él le resultaba imposible por sus ocupaciones profesionales.
"Pongo el club en manos de una persona que quiere mucho al Hércules y ha hecho mucho por el club. No podemos dejarlo en mejores manos", insistió el empresario, quien pidió a los jugadores "que dejen de mirarse el ombligo y corran más" para poder llevar al equipo a la promoción.
"Podemos traer veinte entrenadores, pero estamos en manos de los jugadores", añadió Ramírez, quien confirmó que seguirá al tanto de la actividad del club como uno de los accionistas de referencia.
"No me bajo de la nave", reiteró el ex presidente, quien aclaró que los abogados del club ya están realizando los trámites para dar legalidad lo antes posible al nombramiento de Hernández.
"Solo es un intercambio de cromos", sentenció el anterior presidente en referencia al cambio producido en el puesto de presidente.