La situación de Ronaldinho desquicia al Fluminense
El veterano jugador brasileño no ha mostrado ni un mínimo detalle de calidad en el equipo brasileño, que ya se plantea rescindir su contrato en diciembre.
La esperada historia de amor entre el Fluminense y Ronaldinho ha acabado en un romance roto. El presidente del club, Peter Siemsen, ya ha dejado caer que el astro brasileño podría abandonar el club antes del fin de su contrato, al término de 2016.
Y es que Ronaldinho no ha dejado ver su calidad en el Flu ni tan siquiera a balón parado. El conjunto brasileño esperaba que el ex del Barcelona fuera el mismo que llevó al Atlético Mineiro a la conquista de la Copa Libertadores en 2013, pero Ronaldinho no ha logrado ofrecer aquella imagen de futbolista maduro y con cabeza en estos tres meses.
Al contrario, su estancia en el Fluminense se ha parecido más a sus fallidos pasos por el Flamengo o el Querétaro y ha llegado a perder la titularidad en un equipo que coqueteaba con el título a su llegada y que ahora pelea por no descender. En las últimas 8 jornadas, ni una victoria, y Ronaldinho, mientras tanto, con un papel testimonial y más preocupado de sus problemas físicos que de otra cosa.
El de Porto Alegre ha perdido la titularidad y ni la llegada de un nuevo técnico, Eduardo Baptista, es un soplo de esperanza para que se vuelva a ver su mejor versión. El presidente lo tiene claro: "Creo que no fue un error ficharlo, pero nuestra situación con él no es fácil. Para poder hacer una evaluación correcta de su desempeño tenemos que esperarnos a que termine su contrato, a finales de 2016... o tal vez esto puede ocurrir mucho antes…".
Se especula con que si el Fluminense decide liberarlo este mismo mes de diciembre, a la conclusión del torneo brasileño, el Palmeiras, equipo que siempre ha suspirado por él, estaría dispuesto a darle una última oportunidad. Mientras tanto, como ya ha dejado caer su hermano y representante Roberto de Assis, Ronaldinho no le perdonará al Flu ni un céntimo si decide rescindirle.