La tensión se apoderó del primer asalto del Paulista
Tanto Corinthians como Palmeiras se fueron de vacío en el partido de ida por la final del Paulista. Un empate a cero que, sin embargo, beneficia ligeramente al 'Timao'.
El respeto y el miedo a encajar un gol se impuso en el partido entre Corinthians y Palmeiras. Ninguno de los dos equipos arriesgó lo más mínimo y el partido terminó con un empate sin goles.
Todo se decidirá en la vuelta que será tan solo dentro de dos días. Eso sí, lo que no faltó fue la tensión, como en toda buena final de un estadual brasileño que se precie.
El primer momento de tensión llegó al final de la primera parte, cuando Mateus Vital y Rony se enzarzaron en la que, como no, acabaron entrando los dos equipos al completo. Al final el colegiado decretó una amarilla para cada uno.
Luego, en la segunda parte, a Jô se le cruzaron los cables de mala manera y fue directo a soltarle un plantillazo a Gustavo Gómez en una acción inocua. Por algún motivo, el colegiado consideró que solo era merecedora de una cartulina amarilla.
Así pues, la final por el Paulista llegará al partido de vuelta cargado de tensión y con el empate a cero del primer duelo seguro que ambos equipos se muestran aún más contundentes.