La Juventus de Turín, con goles del estadounidense Timothy Weah y del turco Kenan Yildiz, impuso su ley este sábado ante el rival de su ciudad, el Torino (2-0), en el conocido como 'Derby della Mole', alargó su reinado en la localidad que comparten y sumó el 9º año consecutivo sin perder.
Después de una racha complicada en Serie A, lejos de su mejor nivel y tropezando en demasiadas ocasiones con empates, la Juventus de Thiago Motta -en su primer derbi- aceleró ante el rival de la ciudad para volver a ganar, mantener de nuevo la portería a cero y presionar a los de la parte alta de la tabla. No pierde ante el 'Toro' desde el 26 de abril de 2015.
Fue la 'Vecchia Signora' la dominadora clara de un partido que, aun así, evidenció que a este equipo le cuesta mucho hacer gol. Numerosas ocasiones de Koopmeiners al limbo, un disparo lejano de Conceiçao, internadas de Yildiz y alguna suelta de Vlahovic no sirvieron para dar la tranquilidad definitiva en un partido abierto hasta el minuto 84, con el gol final del turco, por lo corto del marcador.
Consiguió adelantarse la Juve en la primera mitad, en el minuto 18, cuando a Cambiaso se le antojó otra vez ser el jugador decisivo del equipo. Con una conducción endiablada por el perfil zurdo, dejó rivales atrás, entró en el área y fusiló a Milinkovic-Savic. El meta serbio consiguió parar bajo palos a Cambiaso, pero dejó un rechace con la puerta vacía que Weah aprovechó para encarrilar la victoria.
Mantuvo el control, el mando y el dominio, pero sin pólvora el equipo de Motta. Ocasiones desaprovechadas, precipitación en los últimos metros, desesperación por no materializar. Sensación opuesta que en el lado contrario, donde Kalulu y Gatti desbarataron cada mínimo acercamiento del Torino, un equipo que, aunque presentó batalla, estuvo lejos de merecer algún punto.
Tuvo que llegar, de entre todos, el joven Yildiz, joya del proyecto juventino, para desatar definitivamente la fiesta. Y tuvo que hacerlo, precisamente, en el mismo día en el que Alessandro Del Piero cumplió 50 años. El turco, heredero del '10' de la leyenda juventina, llamado por la afición a ser esa nueva figura de referencia, se tiró en plancha para rematar el centro medido de Conceiçao y puso el 2-0 final en Turín.
La Juve alargó su reinado en la ciudad del norte de Italia. Y con la victoria, manteniendo la puerta a cero, metió presión a la cabeza de carrera, que este domingo se enfrenta en un Inter-Nápoles que puede cambiarlo todo. La 'Vecchia Signora' tiene ahora 24 puntos, como el Inter. El Nápoles tiene 25. Todo abierto.