La venganza se le enfría más a Vidal

Miguel Moreno hace 6 años 4.3k
Vidal quería desquitarse de la eliminatoria de la pasada Champions. AFP

El Bayern de Múnich ha perdido a uno de sus principales valores de cara a la eliminatoria ante el Madrid. Arturo Vidal tuvo que pasar por el quirófano para someterse a una reconstrucción del menisco externo de su rodilla derecha y se perderá un momento que tenía tachado en rojo en su calendario: la semifinal ante los blancos.

El portentoso centrocampista chileno no podrá avivar el sueño de un triplete que se ve factible en Múnich. Aunque se habló desde que se sometió a la operación sobre la posibilidad de forzar, todo ha quedado descartado de manera oficial por el propio club. Un palo muy doloroso para alguien que tenía sed de venganza.

La del 'King Arturo' fue una de las primeras reacciones tras conocerse el emparejamiento de semifinales del máximo torneo continental. Vidal celebró que el azar le deparara un nuevo choque contra el Madrid y mostró por redes sociales sus ganas de ponerse enfrente de los blancos: "¡La venganza es un plato que se come frío! ¡Vamos, carajo!".

Con o sin Vidal, el histórico club alemán servirá la venganza en su plato, pero él no formará parte del menú. Y no podrá hacerlo por un nuevo capricho del fútbol que le ha privado de enfrentarse a un equipo al que sólo ha ganado en una ocasión.

Una rivalidad que viene de lejos

El primer precedente del todoterreno de Santiago de Chile se remonta a la temporada 13-14. En aquella edición de Champions, Arturo se midió a los blancos en dos ocasiones, ambas englobadas en la fase de grupos. La ida, en el Bernabéu, acabó con derrota por 2-1 y la vuelta, en el Juventus Stadium, terminó con tablas (2-2), siendo suyo uno de los goles de la 'Vecchia Signora'.

Sí que tuvo motivos para celebrar ante los blancos un año más tarde en las semifinales del torneo por excelencia del 'Viejo Continente'. Juventus y Madrid se citaron por un puesto en la final de Berlín. La ida acabó con triunfo 'bianconero' en casa (2-1) y la vuelta, un 1-1 en el Bernabéu en el que el protagonista fue Morata, les metió en una final que acabaron perdiendo contra el Barcelona por 1-3.

La bomba estalló en cuartos

Pero la sed de venganza de la que habló Vidal se remonta a un precedente muy cercano, el de cuartos de final de la pasada Champions. En ese partido, el chileno fue uno de los protagonistas al inaugurar el marcador y fallar un penalti justo antes del descanso. Se pudo poner el Bayern 2-0 en la primera mitad, pero ese fallo condenó al equipo alemán, que acabó cayendo por 1-2 a causa de un doblete de Cristiano. El Madrid tuvo las riendas del partido en los últimos minutos gracias a la expulsión de Javi Martínez por doble amarilla.

Ese fallo desde los 11 metros le dejó una espinita clavada, pero el sentimiento de culpa para Vidal fue mayor en el Bernabéu. Con 1-2 en el marcador mientras el minutero mostraba el 80', la prórroga se veía en el horizonte y el Bayern estaba con la moral por las nubes por la remontada, pero Vidal acabó expulsado a cinco minutos del final por una doble amarilla que no se cansó de protestar. Además, uno de los tres goles de Cristiano no debió subir en el marcador por fuera de juego. No obstante, los blancos arrasaron dejando el resultado final en 4-2 en la prórroga.

Más que caer en el Bernabéu, a Vidal le molestó el modo de hacerlo: con polémica arbitral. Es por ello que desde el pasado viernes, en su calendario ya estaba subrayada con rotulador rojo una eliminatoria con sabor a revancha. Pero el fútbol es caprichoso y la venganza se le seguirá enfriando a Vidal.

Mencionados en la noticia

Champions League
Bayern München
Arturo Vidal