Un lustro después de sorprender al planeta fútbol proclamándose campeón de la Premier League, el Leicester vuelve a llevar marchamo de heroicidad. Cumplida la primera vuelta de esta temporada, el conjunto de Brendan Rodgers solo tiene un punto menos que por entonces y presenta datos de rendimiento muy similares. Los Schmeichel o Vardy repiten sumando a nuevos referentes, como Maddison o Tielemans.
Hubo una vez un sueño. Un equipo modesto que se alzó entre los poderosos para ganar la Premier League. El Leicester protagonizó esa proeza, y hace solo cinco años de aquello. Lejos de convertirse en un cuento para los nietos, ahora parece más una semilla. Y que Brendan Rodgers y los suyos quieren imitar. No hay más que comparar la primera vuelta que ha completado esta versión y la de aquel curso 15-16: son prácticamente idénticas.
Con 39 puntos, en la segunda posición y empatado con el líder (por entonces el Arsenal), el Leicester de Claudio Ranieri únicamente había perdido dos encuentros. 11 victorias y seis empates le tenían metido de lleno en la pelea por el título, aunque en ese momento quien más quien menos contaba con que se iría desplomando en la segunda vuelta.
Estos nuevos héroes 'foxes' solo tienen un punto menos, 38, tras haber ganado un encuentro más pero también haber perdido tres más (solo tiene dos empates). Que ahora mismo le valen para ser líderes en solitario, aunque con un partido más que el Manchester United y dos más que el Manchester City.
Un leve matiz entre dos versiones: mientras la de hace un lustro se mostraba algo más punzante (1.95 goles de media), la contemporánea presenta algo más de fiabilidad defensiva tras haber dejado la puerta a cero en tres partidos más (7) y haber encajado cuatro goles menos (21).
Aquel Leicester no solo mantuvo sus números, sino que los mejoró. 42 puntos sumó en la segunda vuelta para proclamarse holgado campeón liguero con diez puntos sobre los 'gunners'. Promedió un 60,53% de triunfos, inferior al actual 63,56% que manejan los pupilos de Brendan Rodgers.
Aún quedan supervivientes de aquel mágico grupo. Kasper Schmeichel y Jamie Vardy son los grandes referentes, pero también permanencen Fuchs, Wes Morgan, Albrigthon, Amartey y Demarai Gray.
No está el alborotador Mahrez, pero sí otro gran descubrimiento como es Maddison. Sin Kanté ni Drinkwater gobernando en la medular, aunque disfrutando de Ndidi y Tielemans. Y si el alemán Huth mandaba en defensa, ahora lo hace el turco Söyüncü, pretendido por equipos grandes, y que ultima su recuperación tras unos importantes problemas musculares.