Esta temporada parece ser la de la renovación. Que sea año de Mundial ayuda (muchos se están levantando allí), pero muchos otros estadios se están adaptando a los tiempos modernos en el Viejo Continente.
Estadio Luzhniki
El estadio del Spartak de Moscú ha recibido un severo lavado de cara para el próximo Mundial. Ya se ha inaugurado, y ha sido de los primeros en terminarse. Albergará nada menos que la final.
Estadio Central de Ekaterimburgo
Este veterano estadio ruso también ha sido reformado para la cita mundialista. Las obras se han prolongado más de lo esperado porque se quiso conservar su monumental fachada.
Estadio Nizhny Novgorod
Uno de los hechos de cero. Su particularidad es que está diseñado para 45.000 espectadores, pero las gradas se pueden ampliar rápidamente para albergar a 10.000 personas más. Y tras el Mundial, reducirá su aforo a sólo 25.000 del mismo modo.
Mordovia Arena
Sito en Saransk, localidad a unos 500 kilómetros al sudeste de Moscú, lleva siete años en construcción. También variará su aforo cuando termine la Copa del Mundo, de los 45.000 a los 28.000 espectadores de un plumazo.
Volgogrado Arena
La futura casa del Rotor lleva reconstruyéndose desde 2014. Se esperaba haber terminado las obras en este 2017, pero es posible que sea de los últimos en terminarse, porque el diseño de su cubierta ha cambiado en varias ocasiones.
Samara Arena
Se comenzó su construcción de cero en 2014, tras dar muchas vueltas sobre cuál sería su futuro emplazamiento en la ciudad. El Krylya Sovetov podrá presumir, cuando se termine, de tener uno de los estadios con cúpula más bellos del mundo.
Zenit Arena
Uno de los pocos del Mundial que se encuentra terminado al 100%. Es también, aunque muchos lo intenten ocultar, el estado más caro de la historia: 1.500 millones de euros, más del doble de lo declarado. Caben 68.000 espectadores y se caracteriza por su espectacular techo retráctil.
Stadionul Ion Oblemenco
Otra remodelación, pero ésta, en Rumanía. El viejo Ion Oblemenco fue derribado hasta los cimientos para dar paso a este imponente estadio, que albergará los partidos como local del Universidad de Craiova. Tiene forma de nido, y se proyectó para 50.000 espectadores, aunque se quedó en 40.000 para reducir gastos. Lleva en construcción desde 2015.
New White Hart Lane
Obra faraónica donde las haya. El club quiso conservar y jugar en White Hart Lane hasta que resultó imposible, mientras el nuevo estadio fagocitaba y hacía empequeñecer al antiguo. No tiene nombre oficial, y está proyectado para acoger a 61.000 espectadores. Y va camino de duplicar el presupuesto estimado.
Wanda Metropolitano
Y qué decir del nuevo estadio del Atleti... Otra obra faraónica que, por fin, tras una década de luchas en despachos, verá la luz recién comenzada la temporada 2017-18. Será, hasta que se termine el siguiente, el estadio más moderno de España.