Aunque son muy pocos casos, en algunas ocasiones se dan familias en las que dos hermanos tiene un don para el deporte profesional. Los hermanos Conde son un ejemplo: ella, jugadora de baloncesto y él, portero de fútbol.
Los hermanos Conde nacieron en Madrid, llevan el deporte en el ADN y, aunque en disciplinas diferentes, ambos comienzan a despuntar como estrellas del deporte de nuestro país.
María, mide 187 centímetros y ejerce como alero en el Uni Girona de la Liga Dia. Diego es portero del Atlético de Madrid B y una de las promesas con mayor futuro de las categorías inferiores del club 'colchonero'.
El caso de María, la mayor, es curioso. Antes de ser campeona de Europa en todas la categorías con la Selección Española, hizo sus 'pinitos' en el mundo del fútbol. Llegó a realizar una prueba con el Atlético femenino y fue aceptada.
Finalmente, seguramente debido a su altura entre otras razones, se decantó por el baloncesto. Tras ser campeona Sub 16, Sub 18 y Sub 20, ha cerrado el ciclo con la absoluta el pasado mes de junio, ganando el Europeo de Baloncesto ante Francia.
Por su parte, Diego, de 19 años, es el pequeño de los hermanos. Se decantó por el fútbol desde muy pequeño, comenzando a los nueve años. Aunque su elección fue diferente a la de su hermana, su herramienta de trabajo es la misma: las manos.
Diego es portero del Atlético B y juega en la Segunda B española. Ya ha entrenado con la primera plantilla del club rojiblanco y es internacional Sub 19. Ambos hermanos cuentan con talento innato para el deporte.
María ya es una estrella del baloncesto español e internacional y Diego está en camino. A base de trabajo y esfuerzo, el guardameta espera poder contar con la oportunidad de debutar con la camiseta del Atletico de Madrid y, quién sabe, si de la Selección Española.