Gran parte de los aficionados radicales del club egipcio Zamalek que acompañaron a su equipo en el último desplazamiento internacional permanecen aún en Túnez, donde han denunciado que tienen miedo de ser arrestados a instancias del presidente del equipo si regresan a su país.
Según diversos medios de comunicación árabes, Mortada Mansour ha denunciado al grupo ultra 'Caballeros Blancos' de insultarle a él y a las autoridades egipcias durante el partido de la copa Confederaciones de África que el Zamalek disputó este fin de semana con el Sfaxien tunecino.
Un partido que concluyó con la victoria de los egipcios por (1-3) y les dio el pase a las semifinales de esta competición, equivalente a la Europa League.
Las autoridades tunecinas han evitado, por su parte, pronunciarse sobre el asunto.
De acuerdo con el diario 'Egypt Independent', el propio Mansur vertió la amenaza del arresto durante una intervención la noche del lunes en el canal por satélite Al-Hayat 2.
"Los nombres de los que insultaron al presidente Al Sisi, al Ejército y a la policía están ahora en poder de la seguridad del aeropuerto, que espera su regreso", agregó.
El enfrentamiento entre Mansur y el grupo radical de aficionados del Zamalek se remonta a agosto de 2014, fecha en la que el abogado denunció amenazas de muerte e incluso aseguró que alguien había intentado asesinarle a la salida de las oficinas del club.
Los ultras, por su parte, acusan a Mansur de complicidad con la Policía en la muerte de 22 aficionados en enfrentamientos ocurridos a las afueras del estadio en El Cairo durante el primer partido de la pasada liga.