Mario Fernandes, una vida de vuelos perdidos

BeSoccer hace 6 años 1.7k
Mario Fernandes (c) nació en Brasil, pero se nacionalizó ruso. AFP/Archivo

Muchas oportunidades se dice que son un tren que no vuelve a pasar, pero a Mario Fernandes, el lateral brasileño nacionalizado ruso las oportunidades le llegaron en avión. Los viajes, la distancia y una polémica nacionalización has hecho de él quien es hoy.

Mario Fernandes saltó a la fama cuando militaba en Grêmio. Llegó incluso a sonar para el Real Madrid, con apenas 20 años, una vez se asentó en el club tricolor de Porto Alegre.

No dio el salto a Europa, quizá por su particular forma de ser. Porque cuando fichó por Grêmio, al verse alejado de su familia, de su entorno, desapareció.

Pasaron tres días hasta que su club volvió a tener noticias de aquel joven de 18 años. Apareció en casa de un tío suyo, en Sao Paulo, a más de 1.000 kilómetros de Porto Alegre.

Se sometió a terapia para superar sus miedos y la depresión en la que aquel traspaso le había sumido. Porque él siempre creyó que iba a ser una cesión de un año, y su club, Sao Caetano, al parecer le engañó.

Llegó a parecer que dejaría el fútbol, pero no fue así. Despuntó y se asentó en Grêmio y con 21 años le llegó la llamada de la internacionalidad. Pero nunca debutó, porque algo extraño ocurrió una vez más.

Nunca cogió el vuelo con el resto de los internacionales. Al parecer, de nuevo problemas personales le privaron de esta oportunidad.

Pero cuando una puerta se cierra (Brasil no volvería a llamarle), una ventana se abre. En 2012 fichó por el CSKA de Moscú, y en 2017 se nacionalizó ruso. Hoy es su lateral diestro titular, algo que quizá Brasil eche en falta en Rusia con las lesiones de Dani Alves y Danilo.

Un traspaso inesperado marcó su carrera, un vuelo que nunca tomó la cambió por completo.

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