Escocia se repuso rápidamente al tanto inicial de Croacia e igualó la contienda por mediación de Callum McGregor, que mandó a la red un disparo desde la frontal tras un mal despeje de Vida.
El gol de Vlasic en el minuto 17 había apagado en parte los ánimos en Glasgow, ya que la afición local veía un poco más lejos la posible clasificación de Escocia a los octavos de final de la Eurocopa.
Con muchos problemas en la elaboración, el combinado escocés se aproximaba al descanso sin poder penetrar en la zaga croata y apuntaba a acumular dos partidos y medio sin marcar.
Sin embargo, cuando corría el minuto 42, Callum McGregor, futbolista del Celtic de Glasgow, llevó el delirio al mítico Hampden Park con un gol que daba vida a todo un país.
El centrocampista, tras una jugada embarullada y casi a trompicones, aprovechó un mal despeje de Vida para, desde la frontal, conectar un disparo que supuso la primera diana de Escocia en la presente edición del torneo.