Me llamo Kane, Harry Kane
Harry Kane arrasa al Liverpool con otro recital. Autor de dos goles y una asistencia, el delantero inglés guió al Tottenham hacia un nuevo triunfo ante un conjunto 'red' sobrepasado y carente de solidez y empaque.
Un ciclón llamado Kane desvastó al Liverpool con una primera parte primorosa y otro gol en la segunda que terminó de dar la puntilla al conjunto de Klopp. La cara del alemán tras el encuentro era la de un hombre frente al fracaso.
El Tottenham despachó al Liverpool con un Kane salvaje y con un plan muy claro: balones a la espalda de Matip y Lovren. Especialmente damnificado quedó el segundo, cambiado a la media hora. Si Kane tumbó al Liverpool, Pochettino aplastó a Klopp.
El nuevo Bond de la Premier League sigue escribiendo capítulos a un 2017 de ensueño. En la Champions aún tiene que firmar una noche grande si quiere meterse entre los grandes, aunque amagó en el Bernabéu; la Premier es de su propiedad, eso ha quedado claro.
El primer tanto del punta llegó a los cinco minutos. Balón filtrado a la espalda de la zaga 'red', basculación pésima del Liverpool, maniobra exquisita en el área y gol. El segundo, obra de Son, también llevó su sello: asistencia tras cabalgada.
La entrada de Oxlade-Chamberlain por Lovren dio algo de empaque al Liverpool y Coutinho se arrimó al área, para felicidad de Klopp. Merodeó el Liverpool a Lloris y Salah enmudeció Wembley, pero resultó un espejismo fugaz: a pocos segundos del descanso llegó el mazazo en forma de gol de volea de Dele Alli.
Kane hizo el cuarto resolviendo un córnero suelto en el área y cerca estuvo del 'hat trick' gracias a un par de cabalgadas imponentes. Mucho Kane y muy poco Liverpool, que sólo se asomó a la meta de Lloris con el 4-1. Para entonces el meta francés ya se había propuesto no encajar más goles.
El Tottenham se consolida en zona Champions al sumar 20 puntos y empatar con el United, segundo. El Liverpool suma 13 y se instala en la mitad de la tabla.