Un monumental Valencia echa al Ajax, hasta ahora la gran sensación de Europa. Un gol de Rodrigo Moreno revienta el Johan Cruyff Arena e impulsa a los 'che', primeros de grupo. El conjunto holandés, semifinalista de la pasada Champions y eliminados entonces a pocos segundos de meterse en la final, se tienen que conformar con la Europa League.
Lo que podría parecer un trámite para Tadic, Ziyech y compañía acabó en la gesta del Valencia. El Ajax se dio de bruces ante la gran obra de Celades, una fabulosa y solidaria actuación del equipo de Mestalla. Rodrigo fue la punta de lanza, el Valencia en pleno una roca. El Ajax se estrelló una y otra vez contra un muro inabordable. Los 'che' vuelven a instalarse en la élite de Europa.
A unos le sobran calidad, a otros no les cabe alma dentro. Y el fútbol no es matemática. La Champions es de todo menos lógica. El Valencia ha enterrado al Ajax. Lo aventura alguien a las 20:55 y le toman por loco. Con un banquillo repleto de canteranos, con una larga lista de lesionados y sancionados, el Valencia ganó al Ajax y sacó billete ganador para estar entre los 16 mejores. Los de Ten Hag deben consolarse con la pedrea.
Ganó el Valencia porque tuvo más tino que el Ajax y porque de principio a fin firmó un partido monumental. Resistió, mordió, sudó, puso nervioso a su adversario; las tuvo el Ajax, pero echó de menos el acierto que sí exhibió en Mestalla. Al cuadro holandés le temblaron las piernas, perdido en el carrusel de disputas, tarjetas y despejes de los últimos minutos. Se dejó llevar el Ajax, bisoño una noche más.
El Valencia de Celades ha seguido su progresión y así ha quedado comprobado en el Johan Cruyff. Una pica más para un equipo grande de Europa, no obstante. Así lo dice la historia, no una buena actuación puntual. Lo mereció el Valencia y obtuvo su premio.
El campeón holandés se hizo con la bola con el pitido inicial y el Valencia aceptó su papel aparentemente secundario. Bien parapetados los soldados de Celades, el Ajax maquinó y generó, sin demasiado brillo pero de forma constante. Y eso que la primera ocasión la empaquetó Rodrigo, un cabezazo en el minuto dos tras córner que se marchó fuera por un metro.
Tadic y Ziyech montaron el campamento base en tres cuartos y el Ajax hizo lo esperado: no especular. Territorio perfectamente abonado para lo que pasó en el minuto 24. A pesar de las intentonas y notables movimientos del bloque de Ten Hag, Ferran detectó a Rodrigo entre tres defensas y el internacional español, habilitado por el torpe Veltman, la clavó en la escuadra. Un error del Ajax, un gol del Valencia.
El tanto fue un sopapo para el Ajax, durante un buen rato desnortado y desubicado en su propio hogar. Rara vez no marca en el Johan Cruyff Arena, otro logro que hay que depositar en el cajón de méritos de Celades. Espabiló el Ajax a pocos segundos del descanso, cuando Van de Beek la picó y Gayá la sacó bajo palos; respondió Rodrigo con otro casi gol que Onana mandó a córner con el pie.
En la segunda parte el Valencia gastó todos los pulmones que tenía y seguramente algunos con los que no contaba. Ziyech casi evapora el sueño 'che' con un disparo cruzado, pero la tiró fuera. Jaume, a pesar de las dudas en algunas salidas, se mantuvo firme, seguro y atinado. El marroquí volvió a tener una clara a pase de Van de Beek, y delante del portero valecianista hizo lo más difícil, que era no mandarla a la portería.
El Valencia también sumó ocasiones, como una rosca de Rodrigo que casi lame la escuadra derecha de Onana. Con Paulista lesionado pero en modo Cid Campeador, los 'che' resistieron en un ejercicio defensivo digno de elogio por su efectividad y solidaridad. Porque el Ajax tenía la pelota y llegaba, pero Jaume no debió obrar más milagros de los debidos. Y si algo exige la Champions es sufrimiento.
Claro que casi dinamita el Valencia lo logrado con una falta de entendimiento entre Wass y Jaume y un disparo desde la frontal de Lisandro. Para entonces el partido entraba en el añadido, Ziyech se volvía a topar con Jaume y Onana se convertía en un delantero más. Paulista vio la roja por supuesto cabezazo a Tadic y ahí acabó todo para el Ajax, desprovisto incluso esa la última oportunidad en el último segundo que en las noches de gloria suelen aparecer. El Valencia se hizo con su victoria, y no la soltó para miseria de un Ajax que tendrá que ver la Champions por la tele.