Mucho Aspas para tan poco Granada

Carlos Torregrosa hace 7 años 4.3k
Aspas se lució ante el Granada con un gol y una asistencia. EFE

La aportación del delantero gallego fue el aspecto que desequilibró la balanza en el primer tiempo, aunque Kravets llegó a asustar a una hinchada que terminó celebrando por todo lo alto el 3-1 definitivo.

El partido comenzó con una antagonía del resultado final. Kravets asustó a la parroquia local con una buena acción que terminó saliendo por línea de fondo.

Y es que el Granada mostró buenos detalles en los primeros diez minutos. Sin embargo, ese fue el tiempo que Aspas le concedió de vida a su rival, y comenzó a aparecer para desinflar las intenciones nazaríes.

Comenzó a calibrar bien el equipo de Berizzo con el paso de los minutos, y en el ecuador del primer periodo pondrñia la guinda a esta reacción gracias a la astucia de su estrella.

Iago Aspas, gol y asistencia para terminar con las esperanzas del Granada

El gallego se erigió como el protagonista del encuentro, algo que comenzó a construir a los 23 minutos con el 1-0. Rubén Vezo se disfrazó de jugador celeste para dejar muerto un balón de los que no desaprovecha el celtiña.

Tras fusilar a Ochoa, el ariete cambió el gol por la asistencia. A cinco minutos del descanso, Bongonda recogió un envío preciso y precioso de su compañero para batir con la zurda al portero mexicano y dejar el partido visto para sentencia en el primer tiempo.

El Celta nadó, se lució y bailó mientras guardaba la ropa

El segundo tiempo tuvo trampa para los visitantes, que jugaban con una losa demasiado pesada, especialmente, al unirla a la cuba que están acumulando desde la primera jornada.

Esa trampa la empleó el Celta para, sin demasiado sufrimiento, lucirse ante su público. Los 'olé' comenzaron a sonar en Balaídos con Aspas, Wass o Radoja dando la mejor versión de los celtiñas.

Kravets encontró su premio, pero Pape sentenció

Entre tanta fiesta local, el Granada siguió intentando cambiar el destino del choque. Tras varias ocasiones, el delantero ucraniano encontró su recompensa al batir a Rubén Blanco.

Anduvo listo el atacante al aprovecharse de una mala cesión a su portero de Cabral. El balón se quedó a medio camino y Kravets sólo tuvo que esquivar al meta y poner el 2-1 en el marcador.

Con el partido casi finiquitado, Pape Cheikh aprovechó una contra para poner el 3-1 y dar moral a un Celta que parece mejorar con el paso de las jornadas.

Por su parte, el Granada se marcha de Balaídos sin poder derribar el cero que reina en su casillero de victorias.

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