Farfán, Alba, Ruth, Adriana, Karina y Raquel han querido ser las voces del Málaga Femenino en este día tan señalado, el Día Internacional de la Mujer, en el que el fútbol femenino alza su puño y se abrocha los cordones para seguir haciendo historia.
El Día Internacional de la Mujer es uno de esos días que no debería existir. No debería existir un día en el que la mujer tuviera que pedir por sus derechos, por la igualdad, por un trato justo en su puesto de trabajo.
El Día Internacional de la Mujer debería extinguirse dando paso a 365 días en el que el machismo tan sólo fuera un término que pudieras encontrar en un diccionario, escrito en pasado, recordado en presente.
Pero, mientras en el fútbol una mujer tenga que pelear el triple que un hombre para conseguir la mitad, el machismo seguirá existiendo también en el presente y el Día Internacional de la Mujer se tendrá que seguir celebrando para que, al menos por un día, se tome conciencia de lo difícil que es, en este caso, ser futbolista siendo mujer.
Muy bien saben del tema las jugadoras del Málaga Femenino. Cuando se pasaron por las oficinas de BeSoccer, Ruth y Adriana ya dejaron titulares que ponían en evidencia la inmensa desigualdad todavía presente en los terrenos de juego.
Ruth y el regate de la discordia
"Conozco casos en los que ha costado mucho más trabajo ser futbolista por el simple hecho de ser mujer", comentaba la zaguera blanquiazul de tan sólo 17 años en una entrevista exclusiva a BeSoccer.
"Los propios padres de los jugadores son los peores a la hora de la igualdad en el campo. Porque para ellos no es lo mismo que te regatee una chica a que lo haga un chico, se lo toman muy mal, hay mucho machismo en el fútbol. Sobre todo cuando juegas en equipos de niños, los padres para mí son los peores", añadió.
Por suerte, sus comienzos en el fútbol sólo guardan un dulce recuerdo: "He tenido la suerte de que siempre me han tratado con igualdad, pero supongo que anteriormente, como a mi compañera Adriana, les costaría mucho más".
La clave la pone Adriana
Y así es. La capitana del Málaga Femenino no tuvo tanta suerte en sus inicios y es consciente de que todavía queda mucho camino por recorrer para poder optar a la igualdad: "En España será casi imposible llegar al nivel de los hombres, aquí todavía hay que derribar muchas barreras".
"No deja de ser un pez que se muerde la cola. Si no hay patrocinios, no hay televisión y si no hay televisión, no hay patrocinios... Los medios de comunicación son muy importantes y que la RFEF nos apoyase, como lo está haciendo ahora, aparte de otras instituciones. Cada vez hay más patrocinios y eso se nota en cuanto a crecimiento", añadió una Adriana que está viendo, al menos, un pequeño cambio entre tanta desigualdad.
Karina y una historia silenciada
Otra delantera en las filas del conjunto de la Costa del Sol, Karina, internacional puertorriqueña de tan solo 24 años, con amplia experiencia en el fútbol internacional y demasiados conocimientos sobre las abismales diferencias existentes en este deporte.
"Hoy es un día memorable para la mujer perseverante, la mujer que lucha constantemente por la equidad. Por eso sería fascinante que tanto los sacrificios físicos como los mentales dentro del fútbol femenino sean valorados de igual forma que en el masculino", comentó Karina.
Además, la atacante considera que el primer paso para el cambio ha de darlo la propia afición: "Lo primero a mejorar debería ser el apoyo de la afición en cada partido, que se viva de igual forma, ya que es un mismo deporte en el que tan solo cambia el jugador".
Al contrario de Ruth, Karina sí que ha vivido en primera persona un trato totalmente diferencial por el mero hecho de ser mujer: "He tenido la experiencia de ser dejada junto a mis compañeras en la sombra de los eventos más importantes por la atención primordial a los equipos masculinos. Refiriéndome en particular a nivel país, hemos sabido hacer historia y dejarla ahí plasmada sin un seguimiento a ese logro".
El "vete a fregar" de Raquel
Algo similar a lo que le sucedió a Raquel, centrocampista de 20 años, pero con edad suficiente como para haber escuchado comentarios de todo tipo de la propia afición: "En las categorías inferiores, cuando jugábamos contra chicos, los mismos padres nos discriminaban con frases como 'dedícate a jugar a las muñecas' o 'vete a fregar".
Un comentario machista más que típico de cualquier Neandertal que coloque sus posaderas en la grada para que sus ojos sean testigos de la calidad presente en el fútbol femenino, aunque, por suerte, hay gente con cerebro en este mundo: "Tanto mi familia como mis amigos y la gente que me rodea siempre me ha impulsado a que hiciese lo que más me gustaba".
Raquel, para terminar sus declaraciones a BeSoccer, quiso lanzar una petición destinada a los medios de comunicación: "Sería un gran paso hacia la igualdad que el fútbol femenino recibiera el mismo trato por parte de los medios de comunicación que el masculino".
Reivindicación 'made in Alba'
También quiso tener voz en este día tan señalado la guardameta blanquiazul de 20 años Alba, que conoce de primera mano la existencia de los techos de cristal en el fútbol y el deporte en general: "El fútbol tiene que seguir dando pasos hacia la igualdad, la dignidad y la visibilidad".
"Las deportistas no podemos dejar de reivindicar nuestros derechos y nuestra valía. Además, los puestos de dirección han de ser ocupados también por mujeres preparadas para ello, para que no haya techos de cristal en ninguno de los estamentos que rodean al deporte", añadió la arquera.
Además, Alba también sabe lo que es que no se reconozca el esfuerzo ni el trabajo bien hecho, tanto social como económicamente, por el simple hecho de ser mujer.
El llamamiento a la igualdad de Farfán
La última en levantar su voz fue la joven zaguera de 18 años Farfán, con mejores experiencias en el fútbol femenino, pero consciente también de lo mucho que queda por trabajar hasta poder conseguir la igualdad.
"La gente tiene que apoyar más al fútbol femenino, volcarse más, tanto como con el masculino, para que así algún día pueda llegar a igualarse", sentenció Farfán, una de las seis jugadoras del Málaga Femenino que ha querido ponerle voz a este Día Internacional de la Mujer, día que ya está llegando a su fin, pero por el que hay que seguir luchando los 364 restantes.